Que siempre sí me gustó ‘Ozark’

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Que siempre sí me gustó ‘Ozark’

Traía mis reservas con “Ozark”, una de las tantas nuevas series de Netflix. Mi prejuicio, como mexicana de sangre morena y amor por los nopalitos, era que de nueva cuenta nos iban a vender una historia sobre los bestiales narcotraficantes mexicanos vs los ilegales, más nunca salvajes, traficantes estadounidenses. Por otro lado, distinguí en el tráiler de “Ozark” una ligera intención de suplir el hueco que dejó “Breaking Bad”, lo cual me provocó una sensación de fastidio.
Por las razones antes mencionadas, le estuve sacando la vuelta durante un par de semanas, hasta que me decidí a darle una oportunidad porque vi que ocupa el segundo puesto en popularidad dentro de las series más visitadas en la IMDB y que goza de un digno 8.6 de calificación. Y qué bueno que no me dejé llevar por la primera impresión, pues realmente me dejó muy satisfecha… aunque es una serie que está generando más ruido y gusto en la audiencia que en la crítica especializada.
“Ozark” cuenta la historia de un economista que deberá cambiar, junto a su familia, la ciudad de Chicago por un pequeño pueblo turístico al lado del lago Ozark, en Misuri, con tal de salvar el pellejo y cumplir con una promesa al cártel mexicano para el que trabaja: deberá lavar ocho millones de dólares en tres meses.
El ritmo de esta serie es lo primero que llama la atención. El primer episodio es trepidante, de ritmo ágil y emoción latente. La intensidad baja conforme avanzan los capítulos, pero a estas alturas ya estás dentro de la historia, que aunque no es perfecta, presenta un escenario bastante inteligente sobre el lavado de dinero.
Otra de las virtudes de esta serie, que uno agradece sobremanera, son las fantásticas actuaciones. Jason Bateman y Laura Linney están magníficos en los papeles que desempeñan. Juntos son tensión pura, dinamita, complicidad. Es la mirada aguda de un matrimonio en decadencia que está dispuesto a todo para proteger a los hijos. También sorprende la joven Julia Garner, en el papel de una inteligente ladrona que dirige a una familia de delincuentes después de que su padre fuera enviado a la cárcel.
Así que esto es lo que ofrece “Ozark” en la columna de ventajas: ritmo apropiado, personajes bien delineados en su psicología, historia astuta. No voy a negar que también cae en los típicos clichés sobre el narcotráfico y que algunos podrán encontrarla fantasiosa y endeble si se le compara con clásicos del género como la exitosa serie  “Breaking Bad” y “The Sopranos”. 
Quizá no llegue al nivel de las grandes, pero promete. Al menos me permitió disfrutar diez episodios sin perderle en ningún momento el interés, sino todo lo contario. 

Mi calificación: 90 de 100. 
Mi Twitter: @CalladitaR