Los centros nocturnos como antros, discotecas, bares, conciertos, eventos masivos, entre otros rubros, como el cine y empresas de logística, no operarán de la misma forma dado a que las restricciones sanitarias complican las formas de trabajo con las que operaban previo a la contingencia sanitaria. 

Producción de series y películas 

Las condiciones sanitarias han paralizado en gran medida la producción de nuevas series y películas.

Además, muchas monedas nacionales han perdido valor debido a la pandemia, lo que significa que los últimos clientes internacionales de Netflix, por ejemplo, no están ganando tanto dinero para la compañía estadounidense.

Otra importante compañía de entretenimiento estadounidense que obtuvo algunas ganancias pero también pérdidas durante la pandemia es Disney.

La compañía se vio obligada a cerrar sus parques de atracciones cuando se tomaron medidas de contención. Según el CEO Bob Chapek, Disney costó al menos 1.4 mil millones de dólares. 

Al mismo tiempo, la demanda de los servicios de transmisión de Disney ha explotado.

La plataforma Disney + lanzada en noviembre ahora tiene aproximadamente 55 millones de suscriptores. Netflix tardó cinco años en conseguirlo. 

Logística imposible

El creciente comercio electrónico según se espera también traiga buenas ganancias a las empresas de entrega que dejan los paquetes en su puerta. 

Dos de las compañías de entrega más grandes del mundo, Fedex y UPS, están ubicadas en los Estados Unidos y han solicitado asistencia al gobierno de aquel país porque tienen problemas logísticos causados ​​por restricciones en la movilidad. 

Aunque el número de compras en línea por parte de clientes privados ha aumentado, el negocio a negocio es el más rentable y la demanda ha disminuido ya que muchas compañías han tenido que cerrar sus puertas o reducir sus actividades durante la pandemia.

Hasta ahora, las ganancias de UPS han caído más del 26% este año.

El sexo vende, pero ya no es así para las y los trabajadores sexuales

Desde Colombia hasta Dinamarca, las ventas de juguetes sexuales aumentaron durante la detención. Es un gran negocio con un mercado que movió casi 27 mil millones de pesos en 2019.

El COVID-19 parece haber dado un impulso a la industria del juguete sexual, ya que las empresas que se especializan en dispositivos de alta tecnología y ofrecen "experiencias remotas" se benefician de la distancia social.

Pero el COVID-19  ha llevado a la pérdida de ingresos y a un mayor riesgo para la salud de las trabajadoras sexuales.

En varias naciones, las trabajadoras sexuales no tienen derechos legales y no son elegibles para los programas de ayuda del gobierno. Japón es una excepción, ya que es un país que ha ofrecido ayuda financiera a las trabajadoras sexuales durante esta crisis.

Ejercicio desde casa (posible fin para los gimnasios)

La pandemia y restricciones de movimiento y viaje han sido malas noticias para los gimnasios, pero las ventas de equipos de ejercicio a quienes se ponen en forma en casa han aumentado. 

En Australia, por ejemplo, hubo compras de artículos de acondicionamiento físico, desde pesas hasta colchonetas de yoga.

El llamado área de "aptitud física digital" también ha aumentado.

Según un informe de la firma de consultoría Strategy Analytics, las ventas de smartwatch aumentaron un 22% a principios de 2020 en comparación con el mismo período del año anterior.

Los entrenadores personales están tratando de usar Internet para reemplazar las sesiones tradicionales. Sin embargo, esta situación es difícil para muchos profesionales de la industria y varios gimnasios han tenido que cerrar sus puertas.