La compañía de auditoria ha sido protagonista de otros infortunios, además del infame traspié de los Oscar

La compañía de auditoria ha tenido más de tres décadas de experiencia en la compañía prestando sus servicios de contabilidad, auditoría y asesoramiento técnico empresarial para clientes multinacionales.

La auditora es conocida por su transparencia y buen manejo de las finanzas de grandes empresas internacionales, sin embargo, en esta ocasión, puede que su reputación no vuelva a ser la misma tras su descuido frente a millones de espectadores.

Caso del Super Bowl LI

Un ejemplo fue su trabajo durante el SuperBowl LI, donde se realizó un estudio sobre la cantidad de dinero que los asistentes invirtieron en su visita a la ciudad de Houston. La cifra es bastante inferior a los 220 dólares de media que se gastaron los asistentes al partido del año pasado, celebrado en la localidad californiana de Santa Clara y es la primera vez desde 2013 que no se superan los 200 dólares de gasto por persona.

El partido más importante del futbol americano fue trasmitido por la cadena Fox, seguido de cerca por la empresa PwC quienes monitorearon la asistencia de más de 110 millones de asistentes.

Caso de rompimiento con el Vaticano

Un evento similar al traspié de los Oscar, fue la suspensión del contrato entre la compañía con el Vaticano el mes de abril del año pasado.

La asociación firmada entre Goerge Pell, ministro de Economía del Vaticano, y la firma PwC fue una reforma emprendida por el mismo Pontífice, el Papa Francisco.

La razón de la suspensión de dicha relación, se supone, fue debido a las presiones de los cardenales Pietro Parolin, y su adjunto, Angelo Becciu. Según ciertas fuentes, la suspensión fue motivada por diferencias en el proceso para adjudicarle el contrato a PwC.

Esta “suspensión” llevó a despertar recelos y suspicacias, ya que se da a pocos meses de que la prensa italiana revelara oscuros negocios y movimientos financieros irregulares dentro del vaticano, según informó la revista Proceso.

Martha Ruiz y Brian Cullinan, ejecutivos de parte de la compañía PwC (Pricewaterhouse Cooper) fueron los protagonistas del error sobre la entrega del premio más importante de Hollywood.

Ambos empresarios brindaron entrevistas y atendieron a la gala, ignorando el “desencanto” que brindarían a la producción y elenco de la película nominada “La La Land”.

A continuación, la disculpa emitida por la empresa a través de Twitter, y el momento del error durante los Oscar: