CDMX.- La Comisión Reguladora de Energía (CRE) dejó en manos de Pemex y las empresas que le contraten el transporte de petrolíferos las negociaciones para enfrentar el robo de combustibles.

La dependencia, que revisó las condiciones bajo las cuales la petrolera dará el servicio de transporte y almacenamiento de combustibles, señaló que el pacto deberá sujetarse a unas cláusulas conocidas como "Negociación de Condiciones Especiales".

Originalmente Pemex quería identificar las tomas clandestinas como casos fortuitos o de fuerza mayor, pero la CRE se lo negó pues esto incentivaría a la empresa a emplear los medios necesarios para evitarlas.

"Los robos y las tomas clandestinas no son consideradas situaciones de caso fortuito o de fuerza mayor. Esto debido a que su incidencia sí puede ser disminuida a través de medidas preventivas", señaló la CRE en una respuesta por escrito sobre el tema.

En cambio, señaló que se podrán negociar como condiciones especiales donde pactarían porcentajes de pérdida de combustible sin penalización y la contratación de seguros.