Los municipios conurbados de Ramos Arizpe y Arteaga reportaron cierre de carreteras rurales, peligro de derrumbes de casas, deslaves, daños a productores de manzana y la activación de programas de repartición de cobijas ante las bajas temperaturas atípicas que “congelaron” la Región Sureste ayer.

Por un lado, Jesús Durán, alcalde de Arteaga, señaló que hay preocupación de productores de manzana porque la caída de nieve les provocó daños en sus infraestructura ante la inesperada nevada. 

“Ya no se esperaba, los productores de manzana andan todos preocupados porque la nevada empezó a tumbar instalaciones de malla; esto llega, es un peso enorme, son toneladas y ayer mismo empezaron a tumbarse instalaciones de malla”, dijo.

Durán señaló que aunque no fueron muchos, si hubo manzaneros que sufrieron pérdidas en este sentido

En cuanto a los fruto, destacó que no hubo afectaciones pues la floración aún no inicia.

“Hicimos el reparto de cobijas, la verdad no esperábamos esta nevada, sin embargo, en un rato más vamos a llevar nuevamente unas cobijas a las zonas únicamente donde hay más frío”, dijo.

Durán informó que ante el congelamiento de los caminos se tuvo que “tirar” sal en la carretera rural que va a Monterreal.

Dijo que otras vías a Mesa de las Tablas y Los Oyameles tuvieron que ser cerradas, pues el reporte es que hay congelamiento en las mismas.

“No vamos a abrir las carreteras, inclusive una parte de Los Oyameles los vamos a tener que cerrar porque se está congelando, ahorita la información es que se está congelando la nieve”, destacó.

Lluvias pegan a Ramos
Por su parte, Ricardo Aguirre, alcalde de Ramos Arizpe, indicó que más que el frío, en su municipio les pega la lluvia.

“Nos pega mucho la lluvia constante, reblandece los techos, hay casas antiguas, sobretodo en el centro, de morillos, de tierra y pedirle a la gente que si nota que su casa empieza a pandearse, que por favor acuda a los albergues”, destacó.

Dijo que por las lluvias ayer se registró un deslave en un cerro ubicado por la carretera Monclova, en el ejido Higo, en el que no se reportaron lesionados, pero que el material desgajado sí invadió parte de la carretera.