Netflix y otras plataformas digitales subirán sus precios luego de que el gobierno aprobara el cobro del Impuesto al Valor Agregado (IVA) para las transacciones digitales, el cual entrará en vigor a partir del 1 de junio de 2020.

Desde el año pasado, la Secretaría de Hacienda propuso esta iniciativa, que se aprobó tanto en la Cámara de Diputados y la Cámara de Senadores. En diciembre de 2019, se informó a las empresas que tendrían un plazo de seis meses para registrarse como retenedores de impuesto e integrarse al paquete fiscal de 2020.

Las reglas administrativas se publicaron en la Resolución Miscelánea Fiscal (RMF) para 2020, y la medida se encuentra en el capítulo III bis del decreto de reforma a la Ley del IVA, que a su vez forma parte de la Ley de Ingresos 2020.

Además del nuevo cobro, deberán llevar un registro de los receptores de servicios, proporcionar el número de operaciones hechas y clasificadas por el tipo de servicio y precio, y designar un representante ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT), quien se encargará del cumplimiento de estas obligaciones.

Algunas organizaciones como Mercado Libre y Canasta Rosa solicitaron postergar la entrada en vigor debido a la contingencia sanitaria de coronavirus, pero aunque se discutió, no se aprobó. 

¿Qué es el IVA y cómo me va a afectar?

Este cobro forma parte de los impuestos indirectos, es decir, los consumidores lo pagan en el precio de los productos y los negocios lo reportan a la Secretaría de Hacienda. Este valor no siempre se traslada al usuario final, pero Netflix ya anunció que solo absorberá el 8% del IVA de su paquete básico, el cual pasó de $129 a $139, es decir, solo 10 pesos. Amazon Prime, en cambio, no modificará sus costos, pues ya lo consideraba dentro de su tarifa. Aún no se sabe qué determinaciones tomarán el resto de las empresas.

Además, los ciudadanos pueden solicitar la devolución del IVA siempre y cuando el producto o servicio se relacione con su actividad laboral. Aunque Netflix es más una opción de entretenimiento, otros servicios digitales podrían ser deducidos.

Más impuestos

Además del IVA, el congreso aprobó la retención de Impuesto Sobre la Renta (ISR)  a servicios de transporte, de hospedaje y de enajenación de bienes y prestación de servicios. Estas medidas afectarían a Uber, Amazon, Mercado Libre y Airbnb. ¿Qué quiere decir esto?

El ISR no se cobra por transacción, como el IVA, sino por ganancias; pero en el comercio electrónico es difícil determinarlas de manera inmediata, por lo tanto se realizará una retención de un porcentaje de los ingresos. 

Es variable, en plataformas de transporte va desde el 2% (para ingresos de $5,500) hasta 8% (más de $21 mil); de hospedaje es de 2% ($5 mil) hasta 10% (más de $35 mil), y en comercio de 0.4% ($1,500) a 5.4% (más de $100 mil).

Sin embargo, esto disminuirá el flujo de caja de los comerciantes y aumentará el número de  solicitudes de devoluciones de ISR al SAT. Es decir, una vez se determine la ganancia, las empresas podrán solicitar que se les regrese parte del porcentaje retenido si el cobro del impuesto resulta ser menor.

Estas medidas del gobierno no son el impuesto digital, el cual siguen discutiendo los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), pues no se han podido determinar cómo solicitar impuestos que no causen fugas de capitales o doble pago.