El servicio de confesión para los feligreses que acuden a la Catedral será cancelado durante el novenario, por lo que Hilario González García, obispo de la Diócesis de Saltillo, llamó a la comunidad católica a alcanzar indulgencia plenaria a través de la contrición perfecta.

Explicó que ésta consiste en una acción del penitente, quien, movido por el amor a Dios, se arrepiente y se duele de sus pecados, que aunque no es escuchada por un sacerdote, permite al penitente la virtud del perdón.

“Podemos hacerlo con la oración del Yo confieso, la petición a Dios para el perdón de sus pecados, lo que generalmente decimos al final de la confesión durante las celebraciones religiosas”, reiteró González García.

De acuerdo con lo que enseña el catecismo de la Iglesia Católica, la contrición es el arrepentimiento de la persona; se siente mal por haber pecado y haber ofendido con sus actos a Dios.

“En esta pandemia se puede ganar la indulgencia plenaria aunque no se pueda acercar a la confesión sacramental, donde uno hace su acto y con eso consigue descargar su consciencia”, comentó Monseñor.

Hilario González además recordó que las confesiones solo serán suspendidas en Catedral durante el novenario del Santo Cristo, “pero los confesionarios de otras parroquias permanecen abiertos y disponibles para quien ejerce de forma continua este sacramento”.