Poca cultura por la limpieza muestran saltillenses

Usted está aquí

Poca cultura por la limpieza muestran saltillenses

‘Cochinones’. Miles de chicles “adornan” las banquetas de la calle Victoria, cambiando a negro el color coral del piso.
Esfuerzos de comerciantes y autoridades por mantener la vialidad en buenas condiciones, se ven rebasados por la pobre cultura de limpieza de peatones

Por: Armano Ríos 
Fotos: Marco Medina

Los 42 millones invertidos en la calle Victoria durante 2008, perdieron su “brillo”.

La vialidad creada para ser uno de los mayores atractivos turísticos de la ciudad, está muy lejos de serlo.

Mientras que un pequeño grupo de locatarios de la “de Victoria” ayuda a que el área permanezca lo mejor posible y las autoridades del Ayuntamiento hacen lo propio, la ciudadanía hace todo lo posible porque el lugar parezca basurero.

Los esfuerzos que día a día realiza el Ayuntamiento al destinar una cuadrilla de limpieza para que la calle amanezca sin desechos a partir de que el sol sale, son minimizados ante la cantidad de basura que los paseantes tiran sin ningún rubor convirtiendo el color ostión de las cuatro cuadras que comprenden esta calle, en tonos grisáceos, casi al punto de los negros.

La calle Victoria entró en proceso de remodelación a finales de 2007 que se vivió en 3 etapas; la primera se ejecutó de la calle Ignacio Allende a Manuel Acuña, la segunda de Manuel Acuña a Xicoténcatl, y la tercera concluyó de Xicoténcatl a Guillermo Purcell.

Dentro de la remodelación se comprendió la subterranización del cableado, la ampliación de banquetas, así como el retiro de al menos 82 cajones de estacionamiento que se asentaban sobre la acera sur de la calle. Se instalaron luminarias que avistan tanto a la calle, como a la banqueta, se amplió de 2 metros tres 3 metros y hasta 3.5 metros las banquetas de los 700 metros que comprende “La de Victoria”, en una inversión que costó 42 millones de pesos a la administración del Gobierno del Estado.

‘Alfombra’ de chicles. Miles de chicles que son arrojados irresponsablemente por los peatones, tapizan las banquetas de la calle Victoria.

Sin embargo, los esfuerzos, con el paso del tiempo se fueron cuarteando; algunos de los proyectos fracasaron, y otros quedaron en carpetazo. Dos de los ejemplos más vivos, son el del paseo peatonal con la propuesta de la administración de Jericó Abramo Masso, y tendría un costo de 7 millones de pesos que se invertirían en arbolado, bancas y mobiliario de plazas. Por otro lado, “La calle cobra vida” tuvo la duración de tres años, luego de que fuera abandonada a falta de la implementación de proyectos que aprovecharan la oferta cultural de la ciudad y otras actividades deportivas. Mientras que en las primeras semanas la comunidad artística se postró sobre el asfalto de la calle Victoria, al final, sólo se avistaron algunos payasos y comerciantes informales que arrebataron la zona.

Al día de hoy, las mayores urgencias de la calle Victoria permanece en sus banquetas que reciben más de 2 mil peatones por hora.

Durante un recorrido que realizó VANGUARDIA, a través de una de las calles más populares del centro, se pudo percatar de que el crucero que conecta a la Plaza Tlaxcala con la Alameda de Zaragoza y que recibe a gran parte del turismo que llega a la región, se encuentra en un extraño olvido.

Daños. Los leones que “reciben” a los visitantes, también han sido vandalizados.

Enormes manchas de restos de bebidas, una gran cantidad de chicles sobre las banquetas y otros desechos; la baldosa cerámica transital que se extiende a lo largo de las 4 cuadras que la conforman tiene algunos parches de asfalto, y otros de empedrado al estilo “antiguo”.

Las jardineras que sostienen a más de 20 kilos de tierra, e inicialmente servían para plantar arbustos pequeños están desérticas y repletas de diferentes restos de basura.

Aunque la estatuas de los leones que simbolizan la “sabiduría” del lugar en que se postran, y que vigilan la calle Victoria, y hasta la Alameda, paradójicamente ya presentan desperfectos; sobre todo uno de los que se encuentra con vista a la Plaza Tlaxcala al que se le han caído las vistas superiores de la base en que se postra. 

Los lugares que cuentan con una mayor afluencia de personal, son la Secretaría de Salud, el sindicato del ISSSTE, la Universidad del Centro de México Bachillerato, Preparatoria Humberto Moreira Valdés, y la Universidad del Centro de México en su campus de licenciatura, quienes mantienen mayor actividad, o por lo menos constante en la zona. 

Inversión ‘inútil’

- La calle Victoria fue transformada en su totalidad en 2008.

- La inversión alcanzó los 42 millones de pesos.

- En 2015 fue colocada una línea podo táctil para débiles visuales.

- Las banquetas son sometidas, constantemente, a trabajos de limpieza; poco duran en buenas condiciones.

- Los relojes colocados desde 2008 nunca funcionaron.

- En abril de 2016 fue anunciado un programa para dar constante mantenimiento a la vialidad.

Peligro. Algunos cables de servicios públicos están a la intemperie.

Descuidos en Victoria, responsabilidad de todos

Los peatones que caminan por la calle Victoria no sólo sufren en las aceras, también lo hacen en los pasos de cebra que se encuentran agrietados al igual que las intersecciones que han hecho notar cada vez más las alcantarillas.

El arquitecto Marco Flores Verduzco, subdirector del Centro Histórico e Imagen Urbana, declaró que los descuidos pertenecen a una responsabilidad compartida, pero los problemas probablemente han aumentado gracias a que la calle Victoria ,además de consumidores, recibe diariamente a cientos de estudiantes de dos bachilleratos y una universidad.

Sin embargo, aunque existe una cuadrilla destinada para la limpieza total de la Calle Victoria, no ha sido diseñado un programa permanente para la limpieza integral que se enfoque en esta calle, y ya no se recuerda cuándo fue la última vez que se utilizó el servicio pulidor de pisos para retirar la cochambre, pese a los millones de pesos que ingresan a las arcas municipales por concepto de impuesto predial.

Además, la Calle de Victoria también ha sido motivo de lamentos. Aunque la desaparición del Cine Palacio fue motivo de angustias para la comunidad artística, el Ayuntamiento ha señalado que la intención, por lo menos de este espacio y la Casa del Cisne, es que permanezca la memoria histórica de lo que fueran espacios culturales con alto grado de representación en la ciudad, y que podrían ser rescatados si algún inversionista decide intervenir, o de lo contrario, el Gobierno del Estado descide su recuperación.

Desde abril pasado, el Alcalde con licencia, Isidro López Villarreal anunció que el Ayuntamiento de Saltillo lanzaría un programa de mantenimiento a la calle Victoria, sin destinar monto de inversión, ni fechas específicas, pese a que esta calle llamada “Curato” hasta el siglo 19, resguarda grandes recuerdos en la historia del Saltillo antiguo en el mundo del Virreinato y la ierra tlaxcalteca.