En mi vida tuve la ilusión de crear algo como esto. No imaginaba que a la gente le llamara la atención algo que ha sido mi vida”
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Hoy, después de dos años, el Museo de las Aves abre sus puertas con la promesa de recuperar su posición entre los museos nacionales con mejoras en la museografía
El fundador:
Oficialmente el Museo de las Aves se inauguró el 15 de noviembre de 1993 con la colección del señor Aldegundo Garza, pero la colección nació setenta años antes, cuando siendo un niño de 5 años, Garza colectó su primer ejemplar, un pequeño halcón, un cernícalo americano, que encontró en Ojo Caliente.
“En aquel entonces tenía alrededor de cinco años y andaba de la mano de mi padre, recién me había regalado un riflecito nuevo, razón por la cual mi padre me acompañaba. Cuando vi el cernícalo, mi padre me ayudo para poder apuntarle al avecita y de esta manera colectarla. Ese fue el inicio de mi afición de por vida por las aves”, declaró el ornitólogo.
Desgraciadamente ese ejemplar se perdió a causa del llanto de un pequeño visitante de los Garza De León.
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“Aquel ejemplar desafortunadamente no lo conservo pues un día a la casa acudió una señora acompañada de su hijo, el cual no dejó de mirar el halconcito en todo el tiempo que permanecieron en casa. La señora amablemente le pidió a mi mamá que se lo mostrará al niño para observarlo más detalladamente, su interés creció al tenerlo más cerca que cuando se dispusieron a retirarse simplemente no quiso irse sin el halconcito. Mi mamá muy comprensiva, permitió que se llevaran mi halconcito con la intención de calmar el llanto del niño”.
Con el tiempo la colección fue creciendo y para los años 70, Garza De León ya tenía más de 80 pájaros conservados en vitrinas que él mismo creó, para entonces ya recibía visitas que querían ver su colección, pcoo después y si aviso previo, la Secretaría de Turismo incluyó la casa de coleccionista entre los atractivos turísticos de la ciudad.
Entre las visitas intermitentes, a principios de los 90, llegó a la casa de Aldegundo un grupo de empresarios regiomontanos que le propusieron llevar su colección a Monterrey en donde crearían un edificio exclusivo, lo ocurrido llegó a oídos del entonces gobernador Eliseo Mendoza Berrueto.
“Me dijo, escoja el lugar que a usted más le guste, porque vamos a hacer que su colección se vuelva un museo. Me proponían hacer un edificio nuevo, también uno que se llama el Paraíso, que está por la Aurora y el que está en la esquina de General Cepeda y Juan Aldama que pertenece a la universidad, pero yo elegí este”, recuerda el fundador del museo.
De amateur a experto
Los conocimientos de don Aldegundo han traspasado fronteras, y su asistencia ha sido requerida por ornitólogos del Museo Smithsoniano para la clasificación de la avifauna mexicana. Prácticamente todos los tratados de ornitología de México mencionan y agradecen su colaboración. Hay incluso algunas aves que llevan su nombre, por ejemplo la subespecie del carbonerito mexicano que habita en la Sierra Madre Occidental, cuyo nombre científico esParus scalteri garzai en honor a él.
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Ícono coahuilense
Inicialmente el edificio albergaba el Colegio de San Juan, el cual fue fundado en 1982 por un grupo de sacerdotes jesuitas. Por sus aulas pasaron algunos de los coahuilenses más destacados, entre ellos Francisco I. Madero Alessio Robles, Carlos Pereyra y Arturo Tolentino.
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La primera remodelación
Los arquitectos Yani Herreman y Javier Sánchez, asesorados por el arquitecto Jaime López Alanis del Instituto Nacional de Antropología e Historia, fueron los encargados de que los trabajos de reconstrucción se hicieran con estricto apego a la estructura original del edificio, respetando los estilos de las dos épocas en las que fue construido.
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Evolución
Al ser construído, el edificio solo tenía dos alas, pero durante los 50’s le construyeron el vestíbulo de dos pisos para unir las dos alas y así instalar ahí las oficinas del Congreso del Estado. Posteriormente fue sede de las policías Judicial Federal y Judicial del Estado, y por último fue ocupado por dependencias federales como la Secretaría de la Reforma Agraria y la Confederación Nacional Campesina.
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Los inicios
El reconocido taxidermista Pedro Fuentes preparó sus primeras piezas, posteriormente Garza de León aprendió tan bien que después le ayudaba cuando se le acumulaba el trabajo.
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La colección
Cuando se inauguró el museo, en 1993, la colección alcanzaba entonces los mil 500 ejemplares entre los cazados por su propia mano y las donaciones, cuando fue cerrado para su remodelación en 2013, el número de ejemplares ya se había duplicado. El catálogo anterior fue realizado por el señor Emilio Zertuche, fotógrafo y escritor.
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¿Por qué en Saltillo?
“Tengo un profundo amor a mi patria chica, guardo mucho respeto por mis raíces familiares que se encuentran en esta zona del estado, mis padres nacieron aquí, mis hijos y mis nietos, mi realización personal ha sido con base en el trabajo realizado en Coahuila además en memoria de mis padres fue que decidí que el Museo se construyera en Saltillo. En pocas palabras, he querido devolver un poco de lo mucho que he recibido por parte de mi tierra”, Aldegundo Garza.
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Curiosidades
La única ave que no pertenece al continente americano es una avestruz, que se utiliza junto con un colibrí para ilustrar los extremos en tamaños de aves.
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Los cambios
Dentro de las obras que se hicieron en el interior del inmueble se modificó toda la decoración, el piso, se colocó tablaroca, se cambió la cristalería y la exhibición museográfica. Además se informó que en las salas se podrá encontrar una oferta digital con la que no se contaba antes. Además, de acuerdo con fuentes cercanas al museo, éste contará con un mayor número de ejemplares para exhibición.
Línea del tiempo
1982 Se construye el edificio para albergar al Colegio de San Juan.
1990 Instalan el vestíbulo de dos pisos para albergar las oficinas del Congreso del Estado.
1993 Abre sus puertas el Museo de las Aves.
2013 En su vigésimo aniversario, se cierra el museo con la promesa de abrir en seis meses.
2014 Se dijo que no había recursos para continuar con las obras.
2015 Cumpliendo 22 años, la remodelación museo llevaba un 20% de avance.
2016 Reapertura
73% de la avifauna mexicana se encuentra representada en el museo
14 empleados y más de 20 guías voluntarios, tenía el museo tras su inauguración
100 mil personas llegó a recibir el museo en un año
2 Zonas protegidas tiene bajo su resguardo el Museo, para la preservación de aves locales.
El dato
> De acuerdo con el patronato, la nueva exhibición está proyectada para poder hacer cambios de los mismos cada 2, 3 meses o una vez al año, para que la gente vea especies diferentes.
Para recordar
> Además del Museo, el patronato también cuenta con la custodia de dos reservas naturales. Una cerca del ejido Buñuelos, en donde cuidan del gorrión worthen, especie endémica y está en peligro de extinción; y en Ciénega de la Purísima, un lugar conocido como El Tarai, donde vuela la cotorra serrana.
Con información de México Desconocido