Para garantizar el espacio requerido para la futura canalización del Arroyo El Cuatro, el Cabildo de Saltillo aprobó incrementar la reserva de tierras al norte del municipio con uso de suelo de parque hídrico.

Las previsiones son derivadas de la contingencia presentada por desastres naturales hidrológicos en la ciudad a finales del mes de julio del presente año.

La obra se haría en dos posibles trazos, sobre los cuales, en el primero, identificado como opción A, se requirió la declaratoria de parque hídrico a lo largo de mil 167 metros, a partir de la calle Álamo Gordo cruce con De los Sauces, en Los Molinos, y otro tramo de mil 305 metros hacia su conexión con el Arroyo Ceballos.

En la B, el municipio cambió el uso de suelo a lo largo de mil 217 metros igualmente a partir del mismo punto en Los Molinos, y otro tramo de tres mil 120 metros para desembocar también en el Arroyo Ceballos.

En ambos casos, la extensión reservada conecta con el parque hídrico ya contemplado anteriormente en el Plan Director de Desarrollo Urbano, con 25 metros hacia cada lado del centro del eje del recorrido.

“El problema es que si no bloqueas las dos, mientras tanto estás haciendo un proyecto para definir por dónde es el mejor lugar para la obra, lo que te puede pasar es que te soliciten un permiso de fraccionamiento y tú no se los puedes detener”, explicó un regidor.

Explicó que una vez que se decida, de acuerdo a un estudio, cuál de las dos opciones es mejor, que podría ser en un mes, inmediatamente se libera el uso del suelo del parque no utilizado.

En el proceso, previó el edil, habría afectaciones a propiedades privadas, por lo que sería necesario indemnizar.

Añadió que lo verdaderamente difícil vendría una vez definida la ruta, pues se tendría que hacer la obra que hace 4 años estaba calculada en 350 millones de pesos de manera tripartita, entre CNA CEAS y Municipio.

“Es una lana, además la tierra ahorita en cuatro años que han pasado ¿cuánto se ha encarecido en esa zona?; y nada más ve cómo nos está tratando la Federación; ni el municipio ni el Estado tienen para una obra de esas”, alertó.

La alternativa A es muy parecida a la que se proponía en la administración de Isidro López, comentó por su parte Héctor Laredo, especialista en  urbanismo, al opinar que es la que funcionaría mejor.

“La opción B no tiene suficiente sección del Nogalar hacia abajo y se va a desbordar, a menos que lo tripliquen afectando a El Campestre, y a Country Club”, opinó.

“Ese canal -del Campestre- no tiene la sección, tiene 6 ó 7 metros por 4 de profundidad o menos y por ahí no cabe la cantidad de agua que se quiere desviar”, señaló.

Aunque Laredo cuestionó también la vida útil de la obra que calcula el municipio, que es de 250 años, pues cada vez hay más urbanización y con esa visión se debe hacer el diseño.