Madres de familia expresaron a VANGUARDIA que aunque algunas escuelas obedecen la ley y ya no se vende ni se permite que se lleven alimentos chatarra, también afirman que en otras esto no se respeta y los pequeños continúan ingiriendo este tipo de comida que no es sana.

María Guadalupe Hernández dice que aunque en la escuela de sus hijos ya no se vende nada de estos alimentos, ha visto que en otros lugares sí, por eso pide al Gobierno que quiten todo tipo de venta de refrescos y chatarra para que los niños estén sanos.

“Pues en la escuela de mis hijos ya no venden, el problema es que a veces salen y los compran en otro lado, pero también hay escuelas que no han obedecido y que siguen vendiendo estos productos, deberían de quitar los refrigeradores de los refrescos”, dijo.

Por su parte, Teresa Rodríguez dijo que a veces no basta con que quiten los refrescos de las escuelas, pues los padres les dan de tomar refresco a sus hijos en casa.

“Es que a veces uno comete el error de darles refresco en la casa y pues así tampoco se va a lograr nada”, reconoce.
María Elena Suárez opina que hace falta mano firme para que de verdad se cumpla lo que dice la ley y se deje de vender comida chatarra y refrescos en las escuelas, así como que los padres ya no les den a los niños este tipo de golosinas.