De acuerdo con el Informe de la Cuenta Pública 2014 que emitió la Auditoría Superior de la Federación (ASF), durante ese año Coahuila gastó 51 millones de pesos del presupuesto que se asignó para elevar la calidad educativa en educación básica, pero sólo entregó facturas por cinco millones de pesos.

Durante ese año, los estados del país recibieron mil 255 millones de pesos etiquetados para elevar la calidad educativa en preescolares, primarias y secundaria, pero solo se comprobó el ocho por ciento del presupuesto, el resto - mil 170 millones de pesos- se gastó sin presentar documentación comprobatoria.

Aunque Coahuila es de los pocos Estados que sí comprobaron parte del presupuesto gastado, lo hicieron por gastos como compra de vales de gasolina, artículos deportivos; pago a asesores y organización de eventos.

Ante estas irregularidades, la ASF indicó que se deberá entregar la documentación fiscal que compruebe que los recursos realmente se ocuparon en educación, o de lo contrario, se deberá regresar el dinero a la Tesorería de la Federación.

“Se presume un probable daño o perjuicio, o ambos, a la Hacienda Pública Federal por un monto de mil ciento setenta millones de pesos por la falta de documentación comprobatoria que demuestre que el gasto se erogó para el cumplimiento del programa presupuestario”, concluyó la ASF.