CIUDAD DE MÉXICO.- En el Parque Nacional Huascarán, a 35 kilómetros al sur de la ciudad Huaraz, al norte de Perú, se encuentra el Glaciar Pastoruri, a una altura mayor a los 5 mil metros sobre el nivel del mar. Esta mole de hielo desparramada sobre una montaña del mismo nombre (Pastoruri), forma parte de la Cordillera Blanca.

El parque nacional se creó en 1975 con 340 mil hectáreas. En este territorio cerca del cielo surgieron más de 650 glaciares y más de 20 montañas que superan los 6 mil metros de altura sobre el nivel del mar. Y, entre todos ellos destaca el Huascarán, la montaña más alta de Perú, con 6 mil 768 msnm. Dos años después, el parque fue nombrado Reserva de la Biósfera, y, en 1985, recibió la declaratoria como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

El glaciar tiene una extensión de casi dos kilómetros cuadrados de superficie sobre la cima del Nevado Pastoruri. Su longitud es de 1.3 kilómetros por 2.03 kilómetros de ancho.

Su paisaje está compuesto por la Cordillera Blanca cubierta de hielo (la gran masa montañosa de los Andes), la Laguna de Patococha y el vapor de los manantiales: tres estados diferentes del agua.

Se dice que, toda esta belleza natural, podría posicionar al glaciar al nivel de Machu Picchu, como uno de los grandes atractivos del país sudamericano.

Sin embargo, a consecuencia del calentamiento global, el glaciar ha disminuido de tamaño considerablemente. Perú (y, desde luego, sus glaciares) ha sido de los países más afectados. Por ese motivo se creó la Ruta por el Cambio Climático, una travesía que busca generar conciencia entre los visitantes sobre el impacto negativo sobre los glaciares, además de otros graves problemas ambientales.

Pastoruri forma parte de esta ruta, por lo que ha sido habilitado un camino para atraer a los viajeros, quienes pueden subir para apreciar lo que queda de esta lengua de hielo milenario -que, a pesar de todo, sigue siendo imponente-, antes de su completa desaparición, la cual se considera irreversible.

Además del Nevado Pastoruri, la ruta incluye la visita a las lagunas Llanganuco y Querococha; a la zona arqueológica Chavin de Huantar; y a las aguas termales de Pumapampa donde se han encontrado pinturas rupestres y restos fósiles de dinosaurios. De Pumapampa es la planta endémica, puya raimondi, que llega a medir hasta 10 metros de altura, y solo florece una vez; su promedio de vida es de 100 años.

La caminata al Glaciar Pastoruri no es para todos, pues se requiere de una excelente salud y condición por los efectos que puede producir la altitud.

Para mover conciencias, los guías conducen a los viajeros al punto exacto donde anteriormente se encontraba una gran cueva de hielo. Mediante una clara explicación, muestran lo que queda ahora.

El turismo local también te da la oportunidad de practicar activiades de aventura sobre el hielo, escalar o montar a caballo, pero sin olvidar que la intención principal es fomentar la responsabilidad ambiental.