PHOENIX.- Como el resto del mundo, el beisbol busca recuperar algo de normalidad tras un año de alteraciones debido a la pandemia.

Así, el viejo ambiente de una pretemporada de Grandes Ligas en febrero ha provocado en los pitchers grandes deseos por lanzar rectas y curvas, a fin de prepararse para una temporada normal de 162 juegos.

Pero los coaches y gerentes tienen un mensaje para esos lanzadores: No hay necesidad de apresurarse.

“La pretemporada dura 50 días”, destacó Scott Servais, el piloto de los Marineros de Seattle. “Para poner esto en perspectiva, nuestra temporada del año pasado duró 66 días. Así que tenemos tiempo”.

Hasta el jueves, prácticamente los 30 equipos habían puesto en marcha los entrenamientos de lanzadores y receptores. Ahora las distintas organizaciones trabajan para definir la forma en que administrarán la carga de trabajo de los pitchers después de que trabajaron menos de la mitad de los innings habituales durante la campaña 2020, abreviada por la crisis global de salud.

El número de lanzamientos y el límite en la cantidad de innings no son conceptos nuevos. Los equipos hacen todo lo posible por proteger a sus lanzadores, particularmente los prospectos de elite.

El salto de 60 a 162 juegos en la temporada genera otra variable a considerar.

Los clubes evalúan todo tipo de estrategias, incluidas las rotaciones de seis abridores en algunos casos, para evitar que los brazos se desgasten demasiado.

Washington tiene suerte de contar con cuatro veteranos destacados en su rotación: Max Scherzer, tres veces galardonado con el Cy Young; Stephen Strasburg, el Jugador Más Valioso de la Serie Mundial de 2019; Patrick Corbin, y Jon Lester, adición en el mercado de agentes libres.

Mike Rizzo, gerente general de los Nacionales, dijo que esos lanzadores entienden cómo responde su cuerpo y cómo prepararse. Pero los jóvenes, muchos de los cuales no lanzaron suficientes innings el año pasado, tendrán que estar bajo una atenta supervisión.

“Vamos a tener que tomar en consideración eso”, dijo Rizzo. “Las variantes en tu organización van a ser relevantes de verdad, quizá más que nunca antes, por la falta de innings acumulados el año pasado por casi todos nuestros lanzadores”.

Habrá mucha precaución. Pero algunos serpentineros consideran que el tiempo adicional de descanso podría ser en realidad benéfico.

Marcus Stroman, derecho de los Mets, no ha lanzado en un juego de temporada desde 2019. Se lastimó la pantorrilla izquierda cuando se preparaba para la temporada de 2020, y desistió el 10 de agosto de disputar la campaña, al mostrarse preocupado por el coronavirus.

Stroman consideró que la inactividad es una ventaja, pues le dio la oportunidad de mejorar su acondicionamiento.

“Yo no estaba simplemente descansando”, dijo Stroman. “Entrené diariamente. Me preparé para el momento en que debiéramos regresar”.