México ganó participación en el mercado de importaciones automotrices de Estados Unidos de enero a agosto de 2020, el cual se redujo, sin embargo, 28.8% frente al mismo periodo del 2019.

De acuerdo con datos del Departamento de Comercio, la porción mexicana dentro de las importaciones estadounidenses totales de la industria automotriz escaló de 36.2% en los primeros ocho meses de 2019 a 36.5% en igual lapso de 2020.

México es el segundo proveedor de vehículos para el transporte de pasajeros del mercado estadounidense, el primero de autobuses, camiones y vehículos con propósitos especiales y el primero también de autopartes.

Considerando el total de estos productos, las ventas mexicanas a Estados Unidos sumaron 66,378 millones de dólares de enero a agosto del año en curso, una caída de 28.2% interanual.

Separadamente, las exportaciones mexicanas a ese destino fueron por 16,780 millones de dólares en autos (-33.8%), 18,146 millones en camiones, autobuses y vehículos para propósitos especiales (-28.7%) y 31,452 millones en autopartes (-24.6%), a tasas anuales.

Históricamente, Estados Unidos ha sido una de las mayores fuentes de Inversión Extranjera Directa (IED) en México. Según la Secretaría de Economía, los flujos de este tipo de capital a la economía mexicana desde Estados Unidos totalizaron 12 mil 700 millones en 2019, casi 39.7% del total.

Los sectores automotriz, aeroespacial, telecomunicaciones, servicios financieros y electrónica suelen recibir grandes cantidades de IED en el país.

De los tres segmentos, el que ha recuperado más del valor perdido es el de autopartes. Sólo en el mes de agosto, las exportaciones mexicanas de partes automotrices al mercado estadounidense decrecieron 3.1% a tasa interanual, mientras que el conjunto de las ventas externas automotrices en esa misma dirección bajaron 9.4% comparadas igualmente.  Según cifras preliminares, el PIB de México disminuyó 18.7% en términos reales durante el primer semestre de 2020, en comparación con el mismo período de 2019.

Esto refleja el impacto de las medidas internas para combatir el brote de Covid-19, así como deterioro de las condiciones del mercado exterior y una economía mundial más débil y volátil.

En concreto, en marzo, abril y mayo se produjeron caídas drásticas en las exportaciones y precios del petróleo, junto con descensos en las exportaciones relacionadas con el sector automotriz ante la suspensión de las actividades de las plantas de montaje en respuesta a la emergencia sanitaria.

En los meses siguientes se ha dado una recuperación parcial de las pérdidas en las exportaciones automotrices mexicanas, que son las más relevantes dentro de la diversificada base de exportación de México.

Desde 2015, la producción industrial total de México había aumentado significativamente hasta antes de la pandemia. Esta expansión se debió principalmente a un aumento en la fabricación de metales primarios y en los sectores de productos metálicos fabricados y equipos de transporte, así como a un aumento en las exportaciones de manufacturas a Estados Unidos. Si bien las exportaciones de automóviles mantuvieron una tendencia positiva, otras exportaciones de manufacturas continuaron teniendo un crecimiento más lento.

Desde el ángulo de la demanda, las importaciones en el mercado estadounidense cayeron en niveles similares en los tres segmentos de enero a agosto de 2020: las de autos descendieron 32%, las de camiones, autobuses y vehículos con propósitos especiales disminuyeron 33% y las de piezas automotrices se redujeron 24%, a tasas anuales.

Dentro de los cinco principales proveedores de Estados Unidos, México tuvo la segunda menor caída en sus ventas automotrices a ese destino, con Corea del Sur como el menos golpeado (-11.4%) y con peores comportamientos de Alemania (-37.1%), Canadá (32.3%) y Japón (31.6 por ciento).

México es el séptimo fabricante de vehículos de pasajeros del mundo, y produce casi cuatro millones de automóviles al año, a la vez que es el quinto mayor fabricante y exportador de vehículos especializados para las industrias de la construcción y la agricultura.