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Osos del Museo del Desierto parten su Rosca de Reyes
La vida en cautiverio, aunque necesaria para proteger especies en peligro, cobra factura a largo plazo, pues fuera de su hábitat los animales no ejercitan todas sus habilidades ni sacian sus instintos lo que puede llevar al detrimento de su salud mental y física.
Para evitar esto el equipo del Museo del Desierto cuenta con el Programa de Enriquecimiento, con el que desarrollan actividades para todos los especímenes vivos con que cuenta el recinto y en medio de las festividades del Día de Reyes decidieron regalarles a los osos una rosca de reyes, que
disfrutaron totalmente.
La idea fue de la dra. Karina Lozano, encargada del Departamento de Nutrición Animal, quien apoyada por un compañero creó este manjar utilizando los elementos habituales de la dieta omnívora de estas criaturas pero presentados de una forma inusual para despertar su innata curiosidad.
“Cada año en Semana Santa festejamos el cumpleaños de los osos”, comentó para VANGUARDIA, Fernando Toledo, director de Fauna, “no conocemos su fecha de nacimiento pero sí celebramos cuando llegaron aquí al Museo con un pastel. Esto ya se ha vuelto tradición y hemos tenido muchos visitantes y ahora estamos aprovechando ocasiones especiales, como en este caso el Día de Reyes y anteriormente en Halloween que les dimos calabazas para que interactuaran y jugaran con ellas”.
“Todo esto es parte del Programa de Enriquecimiento, que se hace con animales fuera de su hábitat y la principal de la finalidad es mantenerlos sanos”, explicó, “vamos a ver dos cuestiones en cuanto a la salud animal, tenemos la física pero también tenemos que pensar en la salud mental de estos animales, su comportamiento” y oportunistas en cuanto a su modo de obtener la alimentación y ahorita por la época de Reyes, es la primera que lo hacemos así, se les ocurrió hacer una rosca”, agregó.
Por su parte, la dra. Lozano detalló el proceso para la creación de este platillo. “No pedimos ningún material extra, son los alimentos de su dieta diaria. Ese día con las cosas que teníamos ahí empezamos a hacerla”.
“Utilizamos pan integral, zanahorias, manzanas, pastas. Esta rellena de sardina, de nuez, de manzana y también de pasta, que es lo que más les gusta. Para la decoración utilizamos tomate, manzana, huevo y básicamente fue eso. El pan hecho rollo con la comida adentro y decorado por fuera”.
Y así como esta actividad de enriquecimiento hay otras tantas que se llevan a cabo con los osos y los demás animales del Museo del Desierto, que despiertan su curiosa, les presentan con retos mentales y de habilidad y ejercitan en general sus instintos para mantenerlos sanos.
“Por ejemplo lo de los pasteles de cumpleaños se fabrica uno prácticamente sin azúcar, pero sí con harina, leche y huevos y se decora con las mismas frutas que utilizamos para su dieta. Originalmente hacíamos nada más para un animal, en Semana Santa y ahorita ya festejamos cuatro cumpleaños”, agregó Fernando.
Destacó el cuidado que ponen al inventar cada uno de los nuevos retos, para que ningún elemento dañe a los animales, pero eso no evita que sí se pongan creativos en instancias donde saben que algo no comestible no representa peligro y es así como en ocasiones han escondido sus alimentos en cajas o dentro de piñatas.
El director de fauna también comentó que día con día se hace alguna acción similar con todos los habitantes en cautiverio del MUDE, siempre a la vista del público, por lo que hizo extensiva la invitación para visitar el recinto, durante las mañanas y las tardes que es cuando sucede.