La joven actriz norteamericana Jennifer Lawrence está cumpliendo justo una década de haber sido descubierta para el cine con muy buena fortuna por el cineasta y escritor mexicano Guillermo Arriaga.
 
Arriaga buscaba a la candidata ideal que representara el personaje juvenil para la que sería su ópera prima en la dirección, “Fuego” (“The Burning Plain”) y al presentarse a la audición Jennifer Lawrence tan no fue equivocada su decisión de elegirla que al exhibirla en la edición del Festival de Cine de Venecia de aquel año Lawrence ganó el primer premio importante de su filmografía: el Marcello Mastroiani como Revelación, el mismo que en el año 2001 compartieron Gael García Bernal y Diego Luna por “Y tu mamá también”, de Alfonso Cuarón.
 
En el camino Jennifer Lawrence no sólo se convirtió en la actriz mejor pagada de Hollywood al obtener sus películas alrededor de 5.5 billones de dólares a nivel mundial, sino en la única actriz de su generación hasta la fecha en haber ganado un Oscar como Mejor Actriz (por “Juegos del destino”, de David O. Russell, del 2012) y aunque pareció haber caído de su pedestal al ponerse en manos del director y ex pareja en la vida real Darren Aronofsky para la película “Madre!”, que les acerreó abucheos precisamente en la edición del Festival de Venecia del año pasado y una nominación por consiguiente a la Peor Actriz del 2017 el fin de semana pasado resurgió de las cenizas con el estreno a nivel mundial de su más reciente película “Operación Red Sparrow”.

Pareciera que con toda intención con el lamentable antecedente de “Madre!” es que “Operación Red Sparrow” inicia con Jennifer Lawrence en el papel de una bailarina de ballet rusa de nombre Dominika Egorova quien caracterizada muy al estilo de Natalie Portman en “El cisne negro”, dirigida por el mencionado Aronofsky en el año 2010, sufre en pleno escenario una fuerte lesión en una pierna en lo que paralelamente un agente norteamericano de la CIA infiltrado en aquel país de nombre Nate Nash (Joel Edgerton) ve frustrado su plan de encontrarse con un espía ruso del que él sólo conoce su identidad y quien al intentar ver en el Parque Gorky de la capital rusa al ser descubiertos se ven forzados a separarse para encontrarse hasta nuevo aviso.
 
En medio de ese período del próximo encuentro entre Nash y su contacto ruso Dominika es abordada en medio de la recuperación de su ataque por su tío Vanya (Mathias Schoenaerts) para que canalice la frustración por su incapacidad en seguir como bailarina en utilizar su cuerpo como un arma letal al ser reclutada en una agencia rusa de inteligencia que resulta asignada a relacionarse con el agente norteamericano para sacarle la información que sus superiores requieren pero individualmente utilizarlo para su beneficio propio y salir del infierno rojo en el que su mismo tío la ha involucrado.
 
“Operación Red Sparrow” es la tercera colaboración de Jennifer Lawrence con Francis Lawrence, su director de dos episodios de la saga de “Los juegos del hambre” que la catapultó al status de actriz mejor pagada de Hollywood y aunque es un director irregular aquí moldea a la actriz al punto de darle el personaje perfecto para su resurgimiento como la actriz versátil que ya ha demostrado ser.
 
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