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Ojalá tengamos un cuerpo legislativo con independencia
Si las elecciones intermedias en Coahuila en tiempos ordinarios son de por sí avaras en cuanto al número de electores que acuden a depositar su expresión de apoyo para los contendientes en una jornada electoral, con mayor razón en este tiempo de pandemia que obliga a permanecer más tiempo en casa, pues porcentajes pronosticados hablan de entre un 35 y 40 por ciento de votantes que puedan acercarse a las casillas receptoras de votos.
A estos porcentajes raquíticos no les han dado la importancia que realmente representan, pues no hay que olvidar, en el caso del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que si gana la mayoría de las curules, ayudarán a disipar cualquier duda que se pretenda sembrar en el camino de la gubernatura que dará fin al periodo del gobernador Miguel Riquelme, e impulse al candidato de ese partido al triunfo como sucesor.
Eso por un lado, por el otro es necesario que ese partido político demuestre unidad partidista ahora mismo, luchando en favor de sus candidatos, manteniendo la racionalización de su credo político, creando un ambiente de confianza, haciendo a un lado la demagogia.
En cuanto a los candidatos que ahora están en campaña, que se supone fueron escogidos por su identificación con las inquietudes y anhelos del pueblo, existen voces muy ciertas en el sentido de que algunos de los contendientes no conocen el territorio que pertenece a su distrito que están peleando y que actualmente visitan obligadamente y que será difícil que regresen, pues son sitios donde habitan personas modestas que viven al día y que por lo tanto las clases sociales no coinciden y en consecuencia no se atreven a interactuar.
Eso es grave, pues se trasluce que solo se utiliza a los colonos por una conveniencia coyuntural que les servirá para sentarlos en una curul, la que será base para continuar una carrera dentro de la actividad política que les proporcionará una vida cómoda sin preocupaciones.
Una de las estrategias escogidas para seleccionar candidatos del PRI al Congreso del Estado, en algunos casos, fue dar seguridad para que fueran electos de una u otra forma, como es el caso de Eduardo Olmos, que al agregarlo en las lista de los plurinominales quisieron tener la certeza de que encabezará el Poder Legislativo, ya que es muy claro que dejándolo solo como candidato de mayoría tenía grandes perspectivas de perder, pues a pesar de ser oriundo de la región Laguna, no se tiene la seguridad de ganar el distrito por el que lucha con todo y el apoyo del gobernador, de ahí su inclusión a la nómina de los plurinominales para ser el mandamás, pues solo así se tiene la seguridad de enfrentar a los diputados de otros partidos que no verán con buenos ojos al Ejecutivo del Estado, y como seguramente habrá otros candidatos que saben manejar con inteligencia política el ambiente legislativo, máxime cuando cuentan con la influencia de políticos de gran envergadura que pueden cambiar rumbos.
Evaluemos las propuestas de esos candidatos y las de los otros partidos, y sin temor acudamos a emitir nuestro voto por el que tenga atributos de honestidad y capacidad intelectual y política, de manera que den los resultados que beneficien a la ciudadanía, no solo que sea un lugar de recepción de envíos procedentes de Palacio de Gobierno.
Esperemos que si estos candidatos salen triunfantes en la contienda de octubre, sepan que formarán un poder que deberá ser un verdadero freno y contrapeso del Poder Ejecutivo en los excesos que pueda tener en sus iniciativas.
A los diputados que vayan a formar la próxima legislatura doméstica, nosotros como votantes exigimos que a esa institución le den el decoro como cuna de un cuerpo que personifica a un conglomerado escéptico del papel que han representado en ocasiones pasadas, que solo se preocuparon por servir a los otros poderes.
Aguardemos pues el resultado de las elecciones y presionemos para que realmente sea un poder al que le tengamos confianza, pues eso se gana.
La pandemia ha desangelado las campañas políticas, y si a eso le añadimos la desconfianza que inspiran algunos contendientes primordialmente por desconocidos y el poco porcentaje de electores que acuden en las intermedias, tendremos un congreso nada representativo.
Se lo digo EN SERIO.
franciscoaguirreperales@gmail.com
@aguirreperalesf