Pese a que en Coahuila, la maternidad subrogada no está regulada, mujeres de Saltillo y Ramos Arizpe ofrecen su vientre por 150 mil pesos a familias que no pueden concebir.

Grupos privados en redes sociales intercambian información sobre costos y requisitos, e incluso datos sobre las autorizaciones y regulación de la maternidad subrogada en las entidades de Sinaloa y Tabasco, donde algunas coahuilenses son partícipes.

Asimismo se consideran opciones de traslado para llevar a cabo el trámite de forma legal, pues aunque en la entidad no se encuentra expresamente prohibido, todavía existe un vacío legal congelado en la discusión pública y legislativa desde años atrás.

De acuerdo a administradores de estas páginas de Facebook, la subrogación de vientres “no es un negocio, sino la oportunidad de cumplir el sueño de una familia”.

Entre los principales requisitos que se consideran, están: análisis clínicos que den certeza del estado de salud del vientre en alquiler, así como la carga genética, una edad promedio entre 20 y 30 años, antidoping y en ocasiones que ya hayan sido madres.

Los administradores señalaron que ha habido mujeres que piden hasta 300 mil pesos por alquilar su vientre.

En estos grupos, cientos de mujeres ofrecen su vientre destacando los rasgos de su físico, expediente médico, nacionalidad y edad.

“Rento mi vientre, estoy sana, cero vicios. Fecundación in vitro, soy de Saltillo, Coahuila”, publicó una joven de 24 años.

Tras su publicación en el grupo  “Vientres de Alquiler en Latinoamérica” una cascada de comentarios solicitando mayor información por mensaje privado, quienes también destacaron radicar en Saltillo.

Por su parte Daniela Montes, presidenta de la asociación Nacido del Corazón Coahuila consideraron que la maternidad subrogada tiene varios vacíos legales.

 “En algunas partes ya está legalmente funcionando aún hay situaciones que se generan en torno a esto sin regulación. Como el hecho de que las parejas desisten de hacerse cargo del bebé y que las madres hagan esto por necesidad.

“Ocasiones en que el pequeño queda en manos de otra persona, mientras que para las madres es muy difícil hacerse cargo, al grado que llegan a abandonar en los hospitales”, manifestó la activista.