CDMX.- A pesar de que la emergencia sanitaria por el COVID-19 alcanzó ya su fase 3, la maquinaria corporativa del Grupo Salinas no quiere reducir su ritmo, como resultado los casos probados de infecciones se expandieron tanto en sus instalaciones como en los call centers pues sus empleados se sientan a 50 centímetros uno del otro para operar llamadas, a cambio de un salario mensual de 4 mil 200 pesos.

Trabajadores del grupo, quienes optaron por el anonimato expresaron su indignación ante la falta de sensibilidad de los directivos del grupo que permite a Ricardo Salinas Pliego ubicarse como el segundo hombre más rico del país. Tan solo el grupo Elektra consiguió el año pasado 14 mil 742 millones de pesos en utilidades.

Tras la muerte de uno de los empleados del Grupo Salinas bajo sospechas de coronavirus el pasado 14 de abril lo que ha deteriorado el ambiente laboral y ante el desconocimiento del número de posibles contagiados el Grupo Salinas se negó a responder una pregunta al respecto.

DESPIDE ENFERMOS

Pero al interior se adoptaron medidas estrictas como el despido de trabajadores por “recorte” y por “órdenes de arriba”, el pasado jueves 23 se dio de baja a personal sospechoso de haber contraído el coronavirus, además a los directores de área se les presionó para evitar filtraciones a los medios de comunicación.

Con el pretexto de que sus empresas realizaban actividades esenciales para el país, Salinas Pliego obligó a sus más de 70 mil trabajadores a seguir laborando e hizo saber en TV Azteca su repudio a las medidas de emergencia sanitaria.

La anterior no fue su única acción contra las medidas adoptadas por el gobierno federal para mitigar el daño por la pandemia, el viernes 17 el conductor Javier Alatorre hizo un abierto llamado a no hacerle caso a los informes proporcionados por Hugo López-Gatell, subsecretario de Salud sobre el avance de la pandemia.

Ante el repudio ciudadano a Salinas Pliego y su canal de televisión, así como a su conductor, el presidente Andrés Manuel López Obrador se vio obligado a intervenir para apaciguar los ánimos, dijo que su “amigo” Alatorre se equivocó, “como todos cometemos errores” y ordeno que no se sancionara a la televisora, además le dio su voto de confianza a López-Gatell.

VEINTE CONTAGIADOS

Por medio de las empresas outsourcing Grupo Nach y Difusión deservicios Administrativos, S. A. de C.V. el Grupo Salinas tiene operando a 2 mil 300 trabajadores.

Ahí operan en distintos turnos de seis horas diarias, seis días de la semana o 10 horas por turno cinco días de la semana, con un salario de 4 mil 200 pesos mensuales con bonos hasta de 3 mil 200, solo tienen 10 minutos para ir al baño y 20 para comer.

Veinte trabajadores de 130 que laboraban en un solo piso se infectaron de COVID-19 según Rodolfo Huvy C. uno de los infectados quien se encuentra hospitalizado desde el sábado 18 de abril.

En medio del riesgo de contagio, los agentes en espacios muy reducidos tienen la tarea de convencer a los clientes de Banco Azteca o de Elektra sin importar la situación económica que vivan por causa de la pandemia,  para que paguen sus adeudos vencidos, hasta su lugares de trabajo, recibieron un documento de Ricardo Salinas Pliego en el que además de llamarlos a la higiene les asegura que el coronavirus “no es una enfermedad grave” y que era menos letal que la influencia estacional.  (Con información de la Revista Proceso)