"Observation", un videojuego de terror donde el jugador toma el control de la inteligencia artificial

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"Observation", un videojuego de terror donde el jugador toma el control de la inteligencia artificial

"Observation" condensa influencias de muchos títulos de ciencia ficción, además de "2001: A Space Odyssey", la obra maestra de Kubrick.

¿Cómo sería "2001: A Space Odyssey" narrada desde el punto de vista de HAL? Con este punto de partida el estudio independiente No Code creó "Observation", un videojuego en el que el jugador se pone a los mandos de la inteligencia artificial de una nave espacial, en una trama rodeada de tensión.

El videojuego, lanzado para Ps4 y PC, está distribuido por la editorial independiente Devolver Digital y consigue, a través del sonido y la ambientación, una experiencia claustrofóbica para el jugador.

"Estamos muy contentos de lo que hemos conseguido, el ambiente es mucho más aterrador de lo que esperábamos", explica a Efe Jon Mckellan, fundador y director creativo del estudio No Code.

El jugador toma los mandos de SAM, la inteligencia artificial de una nave espacial que se dirige a Saturno. Toda la tripulación desapareció a excepción de la doctora Emma, a la que deberá ayudar a averiguar qué pasó.

"Leí un articulo que revisitaba los lugares comunes de tramas de ciencia ficción desde otro punto de vista. Aquello -explica- me abrió la mente para pensar la historia y fue el detonante de la trama".

"Observation" condensa influencias de muchos títulos de ciencia ficción, además de la obra maestra de Kubrick, el videojuego bebe de influencias de clásicos y títulos recientes de ciencia ficción como "Interstellar", "La llegada" o "Encuentros en la tercera fase".

También de obras de terror como "La Bruja de Blair" y "Apollo 18", de donde toma referencias de cámara fija y formato de falso documental.

El jugador debe resolver una serie de puzles para avanzar en la trama y descubrir qué pasó con el resto de tripulantes. Concebido como un thriller psicológico, el videojuego tiene tintes del género de terror pese a que no existe ningún enemigo concreto.

"Es una combinación de varios elementos", explica Mckellan, cuyo diseño combina la sensación de vacío, el zumbido de la maquinaria y un sonido blanco de fondo. A todo ello se suma el hecho de que toda la tripulación se haya "esfumado" de la nave sin dejar rastro.

"Todo está teñido de una extraña sensación, es como si los muros de la nave te separan de una muerte segura en la oscuridad del espacio. Estas atrapado te guste o no", argumenta.