Saltillo.- Al cumplirse una década, el obispo de la Diócesis de Saltillo recordó durante la misa de hoy a los migrantes asesinados en manos del crimen organizado en San Fernando, Tamaulipas durante el 22 y 23 de agosto del 2010.  

Entre los asesinados había 58 hombres y 14 mujeres los que se negaron a colaborar con el cártel de los Zetas, misma organización que llevó a cabo la ejecución.

“Ellos se negaron a vender drogas. Se negaron a colaborar. Esto lo sabemos por un ecuatoriano que escapó del lugar. Les dijeron que ellos les ayudaban a pasar la frontera y de aquel lado tenían que entregar a droga. No quisieron colaborar y los ejecutaron con el tiro de gracia”, señaló.  

Recordó que es un motivo para conmoverse y reflexionar no sobre la falta de nuestras acciones sino las faltas que hacen cómplices a los católicos   de la parte de mal que hay en el mundo.

Además recordó que muchas desapariciones forzadas en el país son apoyadas desde el Estado mediante la impunidad.   

El religioso señaló que el próximo domingo se celebrará el día internacional de la desaparición forzada y recordó que la desaparición forzada que hubo con el ejército en las calles, junto con los secuestros ocurrieron porque el crimen organizado trabajaba coludido con el gobierno.

Además cuestionó la reacción de las autoridades ante la masacre en Tamaulipas al transportar esa cantidad de personas en traileres y al haber una acusación abierta por parte de un sobreviviente. 

“Hubo 250 mil muertes en dos sexenios. Y en este sexenio no estamos menos.  Todo el engranaje social está dañado. El Tribuna Permanente de los Pueblos descubrió que la desaparición forzada era un instrumento que el gobierno utilizaba para que nosotros no nos diéramos cuenta de la destrucción de nuestra constitución mexicana”, dijo.  

“Se ha mantenido en la impunidad la muerte de los 72 migrantes. Toda esa gente que fue acusada abiertamente por uno de los migrantes es un ecuatoriano que dijo toda la historia. ¿Cómo es qué pudieron pasar en un convoy tráileres cargados de migrantes? Uno de ellos se desvió y llegó al área de San Fernando.

“Cómo es posible que no vieron a los migrantes secuestrados. ¿Cómo es posible con todos los retenes de la Policía Federal del ejército? ¿Cómo que no detectaron todo esos carros?”.

Añadió que en todos los corredores que son utilizados por los migrantes  para llegar a EU que hay en México existe una suspensión de los Derechos Humanos.