Luego que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) anunciara la suspensión de las actividades del confinamiento tóxico de General Cepeda, el obispo de Saltillo, Raúl Vera López, celebró que se respetara la vida de los habitantes con el paro de labores. Asimismo, llamó “locos” a quienes pretenden abrir un tercer Cimari en el norte del Estado. 

“Hay una resolución de un tribunal federal administrativo que ya nos dio una solución en el sentido de que la manifestación del impacto ambiental de la empresa que quiere a como dé lugar, poner un Cimari en condiciones totalmente adversas. Gracias a Dios este tribunal administrativos ante el que impusimos una queja, anuló la manifestación de impacto ambiental”. 

Asimismo, detalló que en este momento la empresa no tiene una base legal para realizar esto y recordó que al confinamiento ya le habían dicho que suspendiera las labores. 

Vera López también denunció que campesinos  de General Cepeda detectaron la entrada y salida de tráilers en el confinamiento de residuos sólidos. 

EXPRESA SU MOLESTIA

A pregunta expresa sobre su opinión ante la instalación de un tercer confinamiento en el norte de Coahuila, Vera López dijo: 

‘No tienen vergüenza, a nivel nacional se necesita poner un lugar especial donde poner esa basura tóxica pero, ¿por qué  las  autoridades admite otro Cimari aquí? Nos quieren achicharar a todos nuestros  hermanos’. Que se vayan al fondo del desierto, allá donde haya condiciones, ¿por qué quieren poner un Cimari en una zona habitada donde están los campesinos… eso no se vale’.