Obama y los emires de Kuwait y Catar analizan la lucha contra el terrorismo

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Obama y los emires de Kuwait y Catar analizan la lucha contra el terrorismo

Foto: Vanguardia/AP
El presidente de EU, Barack Obama, y los emires de Kuwait, Sabah al Ahmad al Sabah, y de Catar, Tamim bin Hamad al Zani, analizaron hoy en Riad los esfuerzos internacionales en la lucha contra el terrorismo.

Estas reuniones tuvieron lugar en el palacio de Diriyah al margen de la cumbre del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) y EU que se celebra hoy en la capital saudí.

Obama también trató en reuniones separadas con Al Sabah y Al Zani los conflictos de Siria, Libia y el Yemen, informó la agencia de noticias saudí, SPA.

Los dirigentes pasaron revista al estado de los lazos bilaterales y las fórmulas para desarrollar la cooperación en todos los ámbitos.

La cumbre entre Obama y los líderes del CCG -integrado por Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Catar, Baréin y Omán- está centrada en los conflictos de Oriente Medio, la lucha contra el terrorismo y la influencia iraní.

Este encuentro sigue al celebrado en mayo pasado en Camp David (EU), en el que Obama ya trató de tranquilizar a los líderes del CCG sobre el acuerdo nuclear alcanzado por grandes potencias con Irán.

El mandatario estadounidense también abordó este punto en sus reuniones bilaterales ayer con el rey saudí Salman y el príncipe heredero de Abu Dabi, Mohamed bin Zayed al Nahyan.

Según sendos comunicados de la Casa Blanca, el presidente evaluó con sus interlocutores "los desafíos que presentan las actividades provocativas de Irán en la región".

Sobre los conflictos regionales, Obama insistió ayer en su compromiso a que haya una transición política en Siria sin Bachar al Asad y en la importancia de que en el Yemen se llegue también a un acuerdo para poner fin a la guerra y evitar la expansión de los grupos extremistas.

En cuanto a la lucha contra el grupo terrorista Estado Islámico, Obama instó a acelerar la campaña de la coalición internacional, en la que están integrados Arabia Saudí, Emiratos, Catar y Baréin.

Washington quiere una mayor implicación militar de estos países en la lucha contra el Estado Islámico, así como en la reconstrucción y la estabilización de las áreas arrebatadas a los yihadistas.