Washington.- El presidente Barack Obama se pronunció, nuevamente, por leyes más severas en el acceso y uso de armas de fuego, luego del tiroteo de esta tarde en una Universidad de Oregon que dejó al menos 13 muertos y una veintena de heridos.

El mandatario aseguró en conferencia de prensa que está comprobado que las leyes actuales que permiten fácil acceso a armas de fuego hace más daño que bienestar a la sociedad norteamericana, Obama pidió a los estadunidenses replantearse las necesidades actuales de tener una o más armas.

Hay un arma de fuego por cada estadunidense viviendo en este país, incluso niños, esto no puede seguir así”, dijo Obama visiblemente molesto.

El presidente añadió que el control de armas es un tema que tiene que ser politizado para poder cambiar las regulaciones actuales.

Espero no tener que salir otra vez durante mi periodo presidencial a darle mis condolencias a las familias de las víctimas de otro tiroteo”, afirmó Obama. “Ojalá situaciones como esta nos den la fuerza para unirnos y cambiar”, finalizó.

Obama denunció que Estados Unidos se convirtió "en una rutina" las masacres por violencia armada, e insistió en que "ningún país avanzado" asiste regularmente a episodios como el ocurrido en Oregon.

De alguna manera, esto se ha convertido en una rutina, las informaciones son rutinas, mis reacciones aquí en este podio son una rutina, y lo es la conversación posterior", afirmó en una dura declaración ante la prensa desde la Casa Blanca.

El mandatario subrayó que las oraciones por las víctimas "no son suficientes" y es necesario abordar el problema lo antes posible desde un punto de vista político para atajar la violencia armada en el país.