WASHINGTON, EU.- El gobierno del presidente estadounidense Donald Trump anunció ayer nuevas sanciones contra Irán y su principal empresa petroquímica por dar apoyo a la Guardia Revolucionaria.

El Departamento del Tesoro dijo que las sanciones se aplicarán a la compañía Industrias Petroquímicas del Golfo Pérsico, 39 de sus subsidiarias y agentes de ventas en el exterior. Añadió que la empresa ha realizado negocios por miles de millones de dólares con la Guardia, que Washington designó “organización terrorista extranjera” el mes pasado.

Las nuevas sanciones fueron anunciadas luego de que el comandante supremo de las fuerzas estadounidenses en el Medio Oriente sostuvo que Irán ha optado por “dar un paso atrás y recalcular”, después de hacer preparativos para un aparente ataque a las fuerzas estadounidenses en la zona del Golfo Pérsico.

Sin embargo, el general Frank McKenzie dijo que no se puede concluir por ello que la amenaza haya desaparecido.

En una entrevista con tres periodistas que lo acompañaron al golfo, McKenzie dijo que le preocupa la capacidad de agresión de Irán y no descarta solicitar fuerzas adicionales para reforzar las defensas contra los misiles y otras armas iraníes.

“En realidad, no creo que la amenaza haya disminuido”, dijo McKenzie. “Creo que la amenaza es muy real”.

McKenzie, jefe del Mando Central estadounidense, y otros oficiales buscan un equilibrio entre convencer a Irán que Estados Unidos está en condiciones de responder a un ataque, y así disuadir un conflicto, y elevar la presencia militar en el Golfo Pérsico.