México.- General Motors México anunció la venta de las nuevas versiones de sus pick up Cheyenne y Silverado, de fabricación mexicana, para los mercados nacional, de Estados Unidos y Canadá, principalmente.

El presidente y director general de la armadora, Ernesto Hernández, dio a conocer que los vehículos que se producen en la planta de Silao, Guanajuato, presentan importantes innovaciones y pruebas nunca antes vistas, como la cantidad de kilómetros recorridos que se asemejan a 14 vueltas a la Luna.

Por primera vez, Chevrolet Cheyenne introduce dos nuevas versiones: RST (Rally Sport Truck) y la Trail Boss.

“Durante un siglo hemos evolucionado en el desarrollo de alternativas para las cambiantes necesidades de transportación y carga de nuestros clientes, y con ello hemos construido el portafolio más completo de pick up en el mercado mexicano, que integra diversas opciones como Tornado, Colorado, Silverado y, por supuesto, Cheyenne”, comentó el directivo.

Ambos modelos estarán a la venta a partir de 2019, aunque ya inició su producción en la planta de Silao, de donde se distribuirá principalmente a los mercados de Estados Unidos, Canadá y México.

Chevrolet Silverado 2019 estará disponible con un motor V6 de 4.3L, transmisión automática de seis velocidades con modo manual, en modalidad cabina regular y doble cabina, y con tracciones 4X2 y 4X4.

Todas las versiones ofrecerán el servicio de asistencia personalizada OnStar con 4G LTE que incluye servicios de conectividad, emergencias, seguridad, asistencia de vehículos robados, navegación y diagnóstico, con servicio de un call center y un hot spot de Wi Fi que permite conectar hasta siete dispositivos al mismo tiempo.

Sus motorizaciones pasaron por un proceso de reingeniería importante, ofreciendo dos motores V8 que incluyen sistema Stop/Start, que otorga beneficios en ahorro de combustible, además de ofrecer la mayor potencia dentro de su categoría.

La Chevrolet Cheyenne 2019 incluye un nuevo sistema de administración dinámica de combustible que permite al motor operar en 17 patrones distintos, alternando la activación entre dos y ocho cilindros, dependiendo de las condiciones del terreno y la demanda del vehículo, con la finalidad de mejorar el desempeño y la eficiencia de combustible.