Se llama Andre Ingram. Tiene 32 años y el martes debutó en la NBA. Lo hizo a lo grande. Vistió por primera vez la camiseta de los Lakers, anotó 19 puntos, con 4 de 5 en triple, en 29 minutos. Causó sensación entre el público del Staples Center, a pesar de la derrota de su equipo ante Houston (99-105).

Ingram llevaba diez años jugando en la G-League, la Liga de Desarrollo, y los Lakers le firmaron un contrato para los dos últimos partidos de la temporada. La plaga de lesiones que afecta a jugadores como Lonzo Ball, Brandom Ingram Kyle Kuzma.

Magic Johnson, director de operaciones de los Lakers, y Rob Pelinka, director deportivo, recuperaron a Andre Ingram del equipo afiliado a los Lakers, South Bay.

Se trata de un tirador, que en los 384 partidos de su carrera en la G-League promedia 10,2 puntos y 25,6 minutos y destaca especialmente por su gran acierto en los triples, con un 46,1%. Jugó los cuatro primeros años con Utah Flash, el equipo filial de los Jazz, antes de firmar por Los Angeles D-Fenders, que desde que la Liga se reestructuró pasó a llamarse South Bay Lakers.

Los 19 anotados por Andre Ingram es la cuarta mejor marca de un jugador de los Lakers en su debut, por detrás de Magic Johnson y Nick Van Exel.

Los jugadores de la G-League tienen contratos de una media de 26.000 dólares. Ingram, para complementar sus ganancias, ha ejercido de profesor de matemáticas. Por su contrato de diez días con los Lakers percibirá , ganará poco 13.000 dólares, la mitad de lo que gana durante toda la temporada en al G-League.

“Desde el momento en que efectuamos el calentamiento, el ambiente fue eléctrico”, explicó Andre Ingram. “Fue muy especial, con cánticos de MVP, una locura. Yo me repetía a mí mismo: ‘Mete los tiros libres”. No solo metió los tres tiros libres que lanzó, sino que también dos canastas de dos puntos y cuatro triples.