En Coahuila los notarios públicos están otorgando de manera gratuita el testamento al personal que trabaja en la primera línea de combate contra el COVID-19, independientemente de su función: desde médicos hasta el personal de aseo o camilleros, dio a conocer Gustavo Adolfo González Ramos.

El presidente del Colegio de Notarios de Coahuila explicó que fue una propuesta del Colegio Nacional del Notariado Mexicano y en esta entidad decidió adoptarse por la mayoría de los integrantes.

“El personal médico, camilleros, personal administrativa, gente de la limpieza, todos quienes estén dentro de un hospital atendiendo a pacientes de COVID-19. No excluimos a nadie. Nosotros les estamos ofreciendo su testamento de manera gratuita”, explicó.

Señaló que el acuerdo es que el personal de la primera línea de combate al COVID-19 puede acudir a una notaría no solo durante la contingencia por la pandemia, sino durante todo lo que resta del presente año.

“No sabemos cuánto va a durar la contingencia, por eso es que los vamos a recibir durante todo el año. El Colegio Nacional lo propuso y nosotros lo aceptamos con mucho gusto”, dijo González Ramos.

Las personas como médicos, enfermeras, camilleros, personal de aseo y otros que estén en contacto con pacientes positivos pueden hacer su programación para que acudan a una notaría, en donde se les va a atender de manera gratuita.

Los profesionales de la salud, administrativos y operativos que acudan a una notaría pública lo único que deben demostrar es que están en la primera línea de batalla contra el COVID-19, y durante todo el año tendrán atención gratuita.

Los requisitos en papelería son identificación y datos generales, tres testigos, pero sobre todo, la voluntad de asentar sus decisiones en un documento que tiene validez jurídica.

Gustavo Adolfo González explicó que en Coahuila también se puede realizar el testamento privado, para el caso de pacientes internados, sin embargo, aquí el notariado no interviene porque no podría dar fe de esta situación dado que aún no se aprueban medios tecnológicos como una videollamada para certificar la voluntad de una persona.