El presidente del Colegio de Notarios de Coahuila, Armando Prado Delgado, reconoció la voluntad de la actual administración estatal para “mocharle el dedo” al gobernador en turno en la designación de notarios públicos, sin embargo, propondrán una reforma integral para modernizar el servicio del Registro Público de la Propiedad y Catastro.

“Se hizo una reforma que no es integral a la Ley del Notariado de Coahuila, data de 1979 y es la más antigua de la República, es obsoleta en su arancel y sus apreciaciones jurídicas. Lo que se hizo fue solamente un remiendo a muchas peticiones, incluso de legisladores”, dijo Armando Prado.

Por ejemplo, la fracción panista (de la anterior legislatura) pedía que los notarios pudieran trabajar como funcionarios estando en funciones de la fe pública, explicó el presidente del Colegio de Notarios.

Señaló que esa modificación fue un error porque puede prestarse a componendas políticas, de igual manera que quienes sean notarios puedan ejercer y estar como legisladores.

De acuerdo con Prado Delgado, la Constitución y la Suprema Corte de Justicia de la Nación impiden a una persona estar investida por dos poderes, en este caso es parte del Ejecutivo cuando es notario, pero un legislador, aún llegando por la vía del voto, estaría en el supuesto de impedimento de dos poderes al llegar al Legislativo.

Dijo que en Coahuila hay casos de legisladores hicieron funciones de legisladores y de notarios, pero sus protocolos como notarios fueron demandados y en algunas ocasiones perdieron por este motivo de impedimento de la Constitución.

Para Armando Prado, presidente del Colegio de Notarios, lo bueno de la Ley es se deja en claro que no habrá dispensas por parte del Gobernador hacia alguien para que alcance un fíat.

“Sí se le mocha el dedo al Gobernador en la forma discrecional que puede decidir directamente quién sí y quién no (puede ser notario)”, explicó Prado.

Sin embargo la misma ley tiene un ligero candado porque al presentar el examen hay cuatro personas, tres del Poder Ejecutivo y una del Colegio de Notarios para validar, pero en caso de un empate técnico, el voto de confianza lo tiene el Ejecutivo, además que tiene mayoría.

Otro aspecto positivo es que se establece que deberá existir un notario por cada 20 mil habitantes, con lo cual en Coahuila no podrá haber más notarias en muchos años, cuando se retiren o dejen de existir casi la mitad de los actuales notarios en funciones.