Nos va a ir de la O*

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Nos va a ir de la O*

*Este artículo se publicó casi íntegro en este espacio una semana antes de la elección presidencial de 2006. Recobra vigencia por el nombramiento del Dr. Rogelio Ramírez de la O, como nuevo Secretario de Hacienda. 15 años después, ¿podrá finalmente poner en práctica su receta?

Llegan a su fin las campañas y el próximo domingo pudiéramos saber quién es el próximo presidente de México, y cómo se repartirá el poder en las Cámaras. Las últimas encuestas parecen indicar que el candidato del PRD aventaja por un par de puntos al candidato del PAN. Se hablará mucho del voto útil en estos días y difícil será para aquellos que pueden tener en sus manos este supuestos voto útil decidirse por firmar ese cheque en blanco y dárselo a alguien en quien no confían.

Escribo estas líneas el 23 de junio después de haber salido de una reunión de trabajo de la Asociación Nacional de Empresarios Independientes (ANEI–www.anei.org.mx), organismo que busca llevar las propuestas de los pequeños y medianos empresarios del País a los tomadores de decisiones en el gobierno, a fin de que este sector tan importante de la economía sea tomado en cuenta. En esta ocasión, el invitado principal de la ANEI fue el Dr. Rogelio Ramírez de la O, principal asesor en materia económica del candidato del PRD, quien cuenta con muy buena reputación en el medio económico y financiero del País. La ANEI hizo una presentación acerca de cómo los empresarios ven la realidad económica del País y planteó propuestas al Dr. Ramírez de la O, mismas que han sido también planteadas a representantes del PRI y del PAN. En México cerca del 99 por ciento de los empresarios son independientes (principalmente micros, pequeños y medianos) y generan un 72 por ciento de los empleos y un 52 por ciento del PIB del País. Por ello es importante evitar satanizar por igual a los empresarios como gente indeseable. Es muy difícil encontrar la frontera entre “los de abajo” y “los de arriba”, como los ha querido describir AMLO. Por ello, es ilustrativo y refrescante participar en una sesión como la del día de hoy, en la que el asesor del candidato y los empresarios participantes son capaces de dejar afuera del salón el encono y la polarización para procurar analizar el escenario económico bajo un eventual gobierno de López Obrador y tener a uno de los principales miembros de su equipo con actitud receptiva y profesional (que dista mucho de la confrontación que ha habido entre AMLO y los empresarios en general).

Después de escuchar las propuestas de la ANEI, el Dr. Ramírez de la O presentó los lineamientos generales y propuestas económicas que tiene AMLO. El diagnóstico me pareció adecuado: falta crecimiento desde hace más de 20 años. Las propuestas parecen razonables en general, con un enfoque marcado a generar empleo y actividad económica a través de grandes obras de infraestructura y adelgazar el gasto corriente de gobierno para trasladarlo a gasto social. Se insiste en que López Obrador, a diferencia de Fox, no tiene compromisos con nadie y eso le permitiría mayor margen de maniobra para tomar decisiones. A excepción de los trenes bala, me pareció una presentación sólida y bien armada que pudo haber sido presentada por cualquiera de los equipos económicos de los tres candidatos principales. La duda está en si la gente que rodea al candidato, y el mismo candidato, dejarán al equipo económico implementar sus planes. La personalidad del Dr. Ramírez de la O y su manejo de los temas económicos me pareció refrescante, sobretodo porque tiene muy claro que “no hay que poner la carreta enfrente de los caballos” y el enfoque debe ser el crecimiento y no las variables monetarias. Parece también muy consciente de que es necesario contar con disciplina fiscal, estímulos a la competitividad de los empresarios nacionales (y no sólo a los extranjeros con un dólar barato) y un gobierno que no sea obeso. Me parece que sea quien sea el ganador de las elecciones, debería considerar seriamente incorporar las ideas, visión y planteamientos que el Dr. Ramírez de la O tiene. En cualquiera de los casos, la duda principal es si “las pirañas” que rodean a todos los candidatos (junto con los intereses creados) dejarían trabajar a alguien como el Dr. Ramírez de la O en un plan económico que se aleja de la ortodoxia tradicional que nos han recetado por casi dos décadas. No podemos olvidar que con Fox los discursos, ideas y planes que exponían el Dr. Sojo y el Dr. Derbez quedaron con muchos pendientes y el rol de ambos no fue tan decisivo como se esperaba (fueron prácticamente devorados por el poder del secretario de Hacienda).

No sé si AMLO sea un peligro para México si llegara a ganar el 2 de julio, pero creo que si el Dr. Ramírez de la O es el prototipo de los miembros de su eventual equipo de gobierno y lo dejan trabajar, muchos nos sentiríamos con menos dudas acerca de la peligrosidad del señor López Obrador.