Una mujer machaca con fuerza los chiles jalapeños que acaba de cocer en un disco gigante, mientras otra le ayuda a picar en pequeños trozos la carne que tienen guardada en vasijas de plástico grandes.

En un poste de luz se detiene un cartelón que dice: “Cafetería Sedesol. Se venden gorditas de harina, maíz, almuerzos, refrescos, pase usted”, e indica a una flecha dirigida hacia un puesto improvisado donde varias personas se organizan para amasar harina y maíz, mientras se escucha en una bocina gigante uno de esos corridos de Calibre 50. 

Esto es el día uno del plantón anunciado desde la mañana del martes por los integrantes de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA). A esta hora de la mañana (09:30), están unas 200 personas dispersas sobre el bulevar Fundadores, a la altura de la delegación federal de Sedesol, donde les prometieron a finales de enero que les entregarían los apoyos sociales dirigidos principalmente a los campesinos.  

“Nos dieron puro atole con el dedo, porque no nos van a dar nuestros apoyos hasta que no se acaben las elecciones. Ya nos dijeron, y no nos vamos a ir de aquí hasta que no resuelvan lo de nuestro dinero”, dice Josefina García, una de las mujeres que también pica nopales afanosamente en el plantón. 

Asegura que los 12 grados que marca el termómetro nos los sienten porque la noche estuvo más helada, aunque durmió acurrucada junto a su nieta Jessi en una silla plegable enroscada con varias cobijas para mitigar el frío.  

Frente a la mesa donde está Josefina otra mujer también puso su pequeño negocio de venta de churritos, paletas, chicles y otros dulces, porque quiere aprovechar sacar algo de dinero extra mientras dure el mitin.

“Apenas llegamos ayer en la mañana y no nos han dicho pa cuándo nos tengamos que retirar”, dice con resignación. 

Este es el primer golpe de la UNTA que recibe Shamir Fernández, el delegado de Sedesol, que apenas asumió el cargo el 6 de febrero pasado. En el día uno de su nombramiento, adelantó que en abril suspenderán los programas debido al proceso electoral, como el de Empleo Temporal, aunque otros permanecerían

vigentes. 
“Los programas que son constantes como: Prospera, 65 y Más se van a adelantar pero estaremos apegados a la ley para que ningún programa se utilice de una manera diferente al que está diseñado y programado”, dijo el delegado en esa ocasión. 

El mitin es vigilado celosamente por una patrulla de elementos de tránsito, mientras que las oficinas están vacías, con las luces apagadas y no hay guardias que cubran las necesidades de la gente que va a preguntar por sus apoyos retenidos.