Su libro más reciente se llama "Las Abuelas Bien" y cuando se le pregunta si los condidatos tienen abuela, ríe y  asegura, "no, no tienen". 

Acto seguido, me da una primicia, "hoy en la mañana estuve reflexionando mucho, mucho; porque con esto del dolor -ciática- tomo una medicinas que me llevan no al séptimo cielo, pero al limbo, no sé a dónde. Entonces estuve reflexionando mucho".

"Y a qué conclusión cree que llegué. Muy lastimosa, muy dolorosa sobretodo. No voy a votar". Y la interrumpo con la intención de reafirmarlo, ¿no va a votar?

"No voy a votar. No voy a votar porque ya a estas alturas del partido como están las cosas, como está la pudrición, los asesinatos, la violencia, la inseguridad, el narco como de todos se dicen cosas terribles".

Entonces axplica, "que si Andrés Manuel, no saben en dónde está el dinero para los damnificados. Que se lo entregaron interiormente al partido. Que los 20 millones que aparecieron del PRI. Que Anaya, que si la nave esa. Todo el ambiente está horrible. Ya robaron boletas".

E ilustra la situación con su experiencia personal, "yo fui candidata a diputada federal y me di cuenta cómo se lucraba con la pobreza. Como ya todo está tan descompuesto, tan deteriorado, tan destruido, no voy a votar. Póngalo usted y diga mis razones".

Y retoma su argumentación, "es como si fuera a votar a una pocilga, pocilga donde viven todos los cochinitos, los grandotes, los chiquitos, los negros, los rositas. No voy a votar porque no me apetece votar, porque si le preguntan a Meade que si Peña Nieto es corrupto dice que no, porque nunca se deslindó". 

Ahora delinea motivos que la llevan a no elegir a los otros candidatos, "López Obrador no cree en la sociedad civil, porque tiene a gángsters, él tiene a mafia alrededor suyo. Tiene a gente como a Napoleón Gómez Urrutia. Y Anaya... No voy a votar. ¿Cómo voy a votar?"

Aclara un punto fundamental, "también esa es una postura política, será la primera vez desde que tenía 18, y ahora tengo 72, que no voy a votar". Este posicionamiento no es falta de amor al país, ni mucho menos, por ello, externa "adoro a México, lo adoro, pero estoy triste por como estamos, estoy muy triste". 

"Tengo conciencia cívica y como tengo conciencia cívica, tengo criterio, como tengo criterio discierno y como discierno llegué a la conclusión de que no voy a votar". 

Finalmente, le pregunto si no considera necesario que la gente acuda a las urnas , ante lo que contesta, "sí, que vayan a votar, por favor, porque mucha gente está esperanzada. Mucha gente sabe qué, va a votar por López Obrador, ok, bienvenido un cambio. Pero mucha gente va a votar por Anaya, por el voto útil. 

"Por Anaya yo no votaría -énfasis en la entonación- ni de chiste".