Aunque la Coparmex vio en la caravana migrante una oportunidad para poder ocupar parte de las 10 mil vacantes que ofrecen empresas locales, Acnur (Agencia de la ONU para los refugiados) indicó que su programa de vinculación para centroamericanos puede ayudar, sin embargo, no tienen la capacidad para resolver el problema, ya que depende de la decisión de los migrantes y de su proceso para solicitar la condición de refugiados.

El gran problema de la industria manufacturera en la región es la falta de empleados para las vacantes. La Confederación Patronal propuso que los integrantes de la caravana podrían ayudar, y la vía más rápida para establecer el contacto es Acnur, el programa de reubicación de refugiados de la ONU.

“Sí conversamos con el sector privado, el número de vacantes disponibles en Saltillo es mucho más grande y si lo sumamos a Nuevo León, Baja California y Jalisco, vemos que la falta de recursos humanos sí es un problema para el sector privado”, comentó Florian Hoepfner, oficial de Soluciones Duraderas de Acnur, quien además indicó que el Programa de Reubicación y Vinculación Laboral no puede decidir el destino de los migrantes.

“La decisión de una persona de participar en un programa debe ser de manera voluntaria y lo que nosotros intentamos hacer es poner a la persona en una situación donde va a poder tomar una decisión informada”, aclaró Hoepfner.

Por parte de la Coparmex, Miguel Monroy Robles indicó que en un primer esfuerzo le propusieron a Acnur establecer un programa piloto con 200 personas, “pero aun así con ese número tan bajo ha sido difícil de articular”, lamentó.

“Es importante tratar de unir esfuerzos para ver si algunos de esos migrantes quisieran quedarse a trabajar en la región, solo que esto implica un trabajo conjunto con la Secretaría del Trabajo, con Coparmex, con el Instituto Nacional de Migración, para buscar la residencia legal de estas personas”, indicó Monroy Robles.

Al respecto, el oficial de Soluciones indicó que han estado trabajando con la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) para intentar agilizar la legalización de los migrantes ya que, según la legislación actual, tienen que permanecer los 45 días hábiles (o más) que dura el proceso en el lugar donde solicitaron asilo.