A tres días de las elecciones del primero de julio, el Instituto Nacional Electoral (INE) descartó cualquier posibilidad de fraude electoral o caída del sistema de cómputo, el cual, aseguró, está blindado contra un eventual hackeo. Y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) dio su aval al Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) luego de auditarlo.

Al presentar ayer un balance de los preparativos finales para la jornada electoral, el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello, hizo un llamado a la población a que acuda a votar, especialmente a los jóvenes que lo harán por primera vez, con la confianza de que este órgano ha adoptado las medidas necesarias para recibir los votos, contarlos en forma escrupulosa y hacerlos valer.

El INE nunca ha pedido un cheque en blanco. La confianza, así lo asumimos nosotros, se construye y se gana, y estamos trabajando para ello, pero no caigamos en los excesos de desconfiar en los verdaderos protagonistas de la democracia que son los ciudadanos, sostuvo Córdova Vianello ante los temores de que pudiera haber un fraude en el que participen funcionarios de casilla.

Por encima de las instituciones y los actores políticos, dijo, la ciudadanía es la mejor garantía del registro de los sufragios, pues es ésta la que se encargará de realizar el conteo como responsable de los centros de votación. Hasta ayer se habían integrado 99.9 por ciento de las casillas.

Sería absolutamente ilógico suponer que 1.4 millones de personas a escala nacional se pudieran poner de acuerdo para realizar una actividad indebida, dijo el consejero Marco Antonio Baños, quien rechazó cualquier posibilidad de fraude y sostuvo que la elección está blindada con diversas medidas.

Tenemos boletas con papel seguridad, que es más grueso que el que se vende en cualquier papelería; tiene fibrillas visibles de varios colores, presenta varias veces el emblema del INE y otros mecanismos de seguridad. Se produce con la vigilancia del Ejercito mexicano y se traslada a los órganos (electorales locales) con ese margen de seguridad, explicó el consejero.

Además, se suman elementos como la tecnología aplicada en la tinta indeleble, el crayón para marcar, la lista nominal con fotografía y la presencia en cada casilla de al menos uno o dos representantes de los distintos partidos. Ante la hipótesis de “una interrupción de energía, o en caso de un posible hackeo”, se han tomado todas la previsiones, agregó la consejera Dania Paola Ravel.

En tanto, el rector Enrique Graue entregó un informe de la auditoría que realizó al PREP la Dirección General de Cómputo y de Tecnologías de Información y Comunicación de la UNAM.

“Con nosotros está el compromiso de la verdad y si existiera cualquier irregularidad se comunicará… tiene altísimos niveles de seguridad”, dijo Graue en entrevista.

La auditoría consistió en pruebas funcionales de caja negra al sistema informático y análisis de vulnerabilidades de infraestructura tecnológica, realizadas entre enero y junio de 2018. También se aplicaron varias configuraciones para responder a distintos escenarios con la finalidad de garantizar la operación, procesamiento y difusión a Internet de los datos.

El primero de julio, la UNAM comprobará ante fedatario público que los programas auditados sean los mismos en la operación y que ningún resultado se haya registrado previamente en la base de datos; realizará dos pruebas durante el desarrollo de la jornada electoral y una más el 2 de julio.

Acerca del PREP, Córdova destacó que será el más rápido de la historia, pero recordó que, a pesar de ello, comenzará a ofrecer datos más tarde que en elecciones pasadas por las modificaciones a las leyes en la materia, que ordenan que las actas de escrutinio y cómputo no se pueden llenar hasta que concluya el conteo de todas las elecciones.

En 11 estados, las casillas únicas recibirán la votación de seis elecciones, locales y federales, lo que causará la tardanza en el flujo inicial de cifras, por lo cual, a la medianoche del domingo, ofrecerá apenas un avance de 12 por ciento.