Proyectar confianza en el trabajo o en la vida diaria tiene recompensas; la gente lo notará y no dudarán en seguirte en algún proyecto o actividad. Tener confianza es básico para el liderazgo, ¿pero cómo conseguirlo?

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La clave está en evitar una palabra: “perdón”.

“Perdón, no entiendo lo que me acabas de decir”. “Perdón, pero no creo que esa sea la mejor opción”. “Perdona que te quite el tiempo, ¿te puedo hablar de este proyecto?”.

El ofrecer una disculpa de inmediato mina la percepción de confianza que otros tienen de ti.

Que diferente sonaría decir “Para no fallar, ¿me lo podrías repetir?”, “En mi opinión, creo que la mejor opción es otra”, “¿Me regalas unos minutos para hablar de este proyecto?”.

Betty Liu, editora de Bloomberg Markets, dice que en una entrevista con el presentador Charlie Rose, uno de los más respetados en Estados Unidos, éste le dijo que no te debes disculpar por hacer preguntas, sólo debes hacerlas.

"Sólo haz la pregunta. Viene de una curiosidad genuina. Si lo haces, la gente te entenderá y querrá satisfacer tu curiosidad”, dijo Rose.

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Cuando no se trata de una pregunta sino de una opinión, en lugar de ofrecer una disculpa por decirla, coméntala, expón tus razones y deja que la gente decida si es una buena idea o no.