El alcalde de Saltillo, Isidro López Villarreal, aseguró que haber presentado una queja ante la Administración Fiscal General un día antes de la toma de protesta del nuevo Gobernador de Coahuila, no fue un tema político. Dice no tener por amenazas de Rubén Moreira Valdés.

El edil explicó que fue cuestión logística, que la Tesorería Municipal  haya reunido toda la información necesaria de los cálculos y las fórmulas sobre cómo se repartieron el valor de las participaciones que provienen de la recaudación del IVA y el ISR de los municipios de toda la federación.

"Reunir toda la información lleva tiempo. Terminamos el día 30 a la 1 de la mañana. Hay una diferencia entre los cálculos del 2017 que se debieron haber entregado, y hay un error en la aplicación de las fórmulas, fue lo que reportamos. Pero si ellos tienen otros datos, que nos digan cuál es el error", aseguró.

Respecto a la amenaza que dijo haber recibido el día de ayer, el edil dijo que no teme por su vida, pero reiteró que lo dijo en el video socializado en sus redes sociales dónde hace responsable al gobernador de lo que le pase a él o a su familia, fue un mensaje claro, sin embargo, no aumentará su seguridad con elementos.

"No es tanto temer por mi vida, sino de una represión, de que digan que ahora van a mandar muchas auditorías o bombardeo a través de medios o a través de maneras legales", aseguró.

En relación a los adeudos que tiene el municipio con las fotomultas, y que ayer mencionó el Tesorero del Estado, Ismael Ramos Flores, el edil respondió que en ese concepto, el Gobierno del Estado también tiene adeudos con Saltillo.

"Si le debemos se lo pagamos, y si nos deben que nos lo paguen, cuál es el problema", dijo.

En entrevista antes de ingresar al Congreso del Estado a la toma de protesta de Miguel Ángel Riquelme Solís, el edil de Saltillo dijo que hasta este momento Rubén Moreira no se ha acercado con él, sin embargo, alertó que la conversación entre ellos que circula en redes sociales es apócrifa. 

Por último, aseguró que su petición para el nuevo gobernador de Coahuila, es revisar detenidamente los errores en la aplicación de la fórmula de repartición de las participaciones generales que le tocan a cada municipio, y solicitó que todo fuera presentado por escrito por parte de la Administración Fiscal General. 

"Así como dice él; a Coahuila lo que le corresponde, yo digo: a Saltillo lo que le corresponde", dijo.

"Vamos a dejarnos de dimes y diretes, hay que concentrarse y responder profesionalmente", indicó.