El corredor de los Saints de Nueva Orleáns, Mark Ingram, fue suspendido los primeros cuatro juegos de la próxima temporada por violar la política de sustancias prohibidas para mejorar el rendimiento de la NFL.

La suspensión deja el ataque terrestre de los Saints con poca profundidad y le da un papel más importante a Alvin Kamara, quien ganó el premio ofensivo de Novato del Año de la NFL en 2017. Kamara comenzó tres juegos y sirvió como un complemento ideal para Ingram, dos veces jugador del Pro Bowl y un ex Trofeo Heisman ganador en Alabama.

El dúo se convirtió en los primeros compañeros de equipo en llegar a 1,500 yardas de scrimmage en la misma temporada, una hazaña que ayudó a llevar a los Saints a la corona del Sur de la NFC.

Ingram se perderá los juegos en casa contra los Buccaneers y Browns, y los juegos de visita de Falcons y Giants.

Ingram jugará su último año de su contrato. Anotó 12 touchdowns por tierra, su mayor cantidad de por vida en 2017. Pero podría perder protagonismo ante Kamara para cuando regrese en octubre y casi con toda seguridad llevará la mancha de una suspensión en el mercado de agentes libres el próximo año.