Neil Young se caracteriza, entre muchas cosas, por su obsesión por la fidelidad del sonido. Esto lo llevó a poner en marcha Pono, un reproductor portátil de música en formato digital de alta resolución lanzado a finales de 2014, que le prometía a los melómanos un sonido “con la misma calidad que en los estudios de grabación”.

Sin embargo, la buena fortuna no acompañó al músico canadiense y Pono se convirtió en un fracaso comercial debido, a varios factores: su precio (unos 400 dólares), la poca capacidad de almacenamiento, una pantalla táctil muy pequeña y la escasa cantidad de música disponible.

Conocido como “Toblerone” por su forma triangular. La empresa se detuvo hace un año, principalmente debido a que antes de su lanzamiento se ignoró el desplazamiento del consumo musical hacia el streaming.

“Las compañías discográficas lo han matado. Lo han matado por insistir en cobrar dos o tres veces más por los archivos de la alta resolución que por los de MP3. ¿Por qué alguien pagaría tres veces más?”, dijo Young a Los Angeles Times.

Con el plan echado abajo, Young decidió jugar al juego de la competencia y desde el 1 de diciembre de 2017, funcionan los Neil Young Archives, un sitio web con su propia plataforma de streaming que posiblemente es la fonoteca existente más exhaustiva de cualquier músico.

La página contiene prácticamente todo el material que el músico ha publicado, desde su debut con The Squires, en 1963, al reciente The visitor, de 2017, pasando por temas inéditos. Todo esto para dar un total de alrededor de mil canciones y contando.

Pese a su navegación poco intuitiva, que lo hace parecido a aquellos sitios web de finales de los 90 e inicios del siglo XXI, la página cuenta con particularidades que son detalles invaluables para los fanáticos de la música.

Así, cada canción está acompañada por una ficha con los créditos detallados, más fotos, documentos, el acceso a la letra y, en algunos casos, a videos, spots de radio o fragmentos de entrevista.

Como siempre hay peros, y en este caso son los inflexibles contratos de la industria musical. De manera que, aunque están catalogados aquí, no es posible escuchar los discos de Neil que ahora están bajo el sello Universal Music y otros más como Motown o Geffen Records.

Neil Young plantea con esto a los músicos de renombre: reunir, ordenar y optimizar toda su música, sin necesidad de dejarle esa tarea a Spotify o iTunes. Mientras tanto, los archivos están disponibles para ser escuchados por cualquiera hasta el 30 de junio de 2018. La calidad depende del ancho de banda de cada internauta.

— Con información de El País.