Rafael Nadal batalló de más para derrotar a un Federico Delbonis que jugó a un gran nivel de tenis, en un partido que incluyó un beso a una recogepelotas tras un golpe. 

Fue 6-3, 7-6 (4) y 6-1 para el manacorí en 2 horas 41 minutos de partido.

En el transcurso del tercer y último set, particularmente en el sexto game, y con Delbonis en el saque, una devolución del español se fue ancha e impactó de lleno en la cara de una de las recogepelotas que estaba ubicada al lado de la silla del umpire del juego. Al instante que Nadal vio que la pelota le pegó a la joven, se acercó para preguntarle si estaba bien y le dio un beso para disculparse por lo sucedido.

El partido siguió y, a los pocos minutos, Rafa sentenció el partido a su favor. Y una vez que pasaron los saludos de rigor con el tenista argentino y la árbitro del encuentro, el español se sacó su clásica vincha y se la regaló a la alcanzapelotas, que con una sonrisa le agradeció el gesto.

Los 33 tiros ganadores y 8 aces del español resultaron contundentes ante un Delbonis que apenas conectó 22 y 2 respectivamente, además de ocho doble faltas.

Probablemente, Federico Delbonis se retire del Melbourne Park con la frente bien en alto. Si bien se despide del primer Grand Slam del año, mostró una buena imagen en cuanto a lo tenístico, lo cual será crucial de cara a recuperar la confianza perdida en la pasada temporada.

El próximo compromiso de Nadal será su compañero de Copa Davis y ATP Cup Pablo Carreño Busta. Con información de Agencias