'Nada ha cambiado': Adrián LeBarón exhibe cómo los sicarios circulan libres y de manera impune en Sonora

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'Nada ha cambiado': Adrián LeBarón exhibe cómo los sicarios circulan libres y de manera impune en Sonora

Adrián LeBarón denunció que fue interceptado por presuntos miembros del crimen organizado, en las inmediaciones del municipio de Agua Prieta, en el estado de Sonora. Foto: Tomada de Internet
Adrián LeBarón denunció que fue interceptado por presuntos miembros del crimen organizado, en las inmediaciones del municipio de Agua Prieta, en el estado de Sonora

Luego de ser interceptado por presuntos grupos criminales, el activista Adrián Lebarón evidenció como nada ha cambiado en esos caminos, a pesar del terrible episodio que terminó con la vida de 3 madres mujeres y 6 niños inocentes, dejando 20 huérfanos.

Adrián LeBarón denunció que fue interceptado por presuntos miembros del crimen organizado, en las inmediaciones del municipio de Agua Prieta, en el estado de Sonora.

En un comunicado emitido este lunes, señala que, “nada ha cambiado en esos caminos, a pesar del terrible episodio que terminó con la vida de mujeres y niños inocentes”, en relación a los integrantes de su familia que fueron asesinados en Bavispe, en noviembre del 2019.

Detalla que viajaba con personas de su familia, y el hecho fue a plena luz del día, porque cada vez se movilizan sin estar en la clandestinidad.

“Hablamos de que este hecho ocurrió a plena luz de día, era por la mañana. Viajaba con algunos de mis hijos y familia, quienes también fueron acosados por estos personajes. A todas luces se trataba de miembros del crimen organizado, que vigilan y operan, cada vez menos, en la clandestinidad”, reprochó.

Foto: Tomada de Internet

Aquí el comunicado íntegro:

En días recientes, al viajar con mi familia, fuimos interceptados al atravesar el municipio de Agua Prieta, Sonora, por un vehículo que iba lleno de jóvenes armados, quienes no pasaban de los 30 años. Nos cercaron el camino para preguntarnos sobre procedencia, nombres, y motivos de viaje.

Hablamos de que este hecho ocurrió a plena luz de día, era por la mañana. Viajaba con algunos de mis hijos y familia, quienes también fueron acosados por estos personajes. A todas luces se trataba de miembros del crimen organizado, que vigilan y operan, cada vez menos, en la clandestinidad.

Estos grupos están operando sin restricciones, imponiendo sus propias leyes, decidiendo quiénes pueden o no transitar México. De acuerdo a versiones de quienes conocen la zona, estos “operativos” se realizan por grupos criminales en disputa. Posiblemente esté involucrado el que participó en la masacre contra mi familia.

Cabe destacar que parte de la familia, los Miller específicamente, frecuentemente son detenidos por grupo criminales, quienes repiten este tipo de operación, por los caminos sonorenses, en los que ocurrieron los lamentables hechos del 4 de noviembre. Nada ha cambiado en esos caminos, a pesar del terrible episodio que terminó con la vida de mujeres y niños inocentes.   

Me identifiqué como Adrián LeBarón, procedieron a realizar llamadas y pudimos salir después de momentos de tensión, pero todo esto me llevó a dos reflexiones:

La primera, no sé si por apellidarme LeBarón, y que los grupos criminales estén bajo el ojo del huracán en la zona, pudimos salir sólo con la lastimosa experiencia, pero ¿bajo qué circunstancias deben estar viviendo todos los que ahí residen, o los que usan este camino para trasladarse a los puntos fronterizos? ¿Cuánta gente va a dejar de usar estos caminos y, por tanto, se seguirá lastimando el intercambio comercial? Hablamos de que no estaban operando en las tinieblas ¿hasta dónde la complicidad de las autoridades? 

Debemos recordar que recientemente se cerró el cruce fronterizo de Berrendo, situado en Janos, Chihuahua, esto por la inseguridad, por lo que es necesario atravesar Agua Prieta para ir al siguiente, sin embargo, este punto es donde los grupos criminales operan y circulan con total libertad. 

El segundo punto es que el viaje que realizaba, era con motivo de una reunión anual que celebramos en familia, algunas veces lo hacíamos en Chihuahua, otras en Sonora, pero en esta ocasión se realizó en Estados Unidos, ya que las familias no tienen la seguridad para viajar a México, muchas migraron después del asesinato de mi hija Rhonita, de mis nietos y más familia, a quienes recordamos y extrañamos de forma impresionante.

Sirva mi experiencia para alertar y hacer visible ese México herido, que nadie ve hasta que suceden hechos terroríficos.

Adrián LeBarón.