Mientras Morena escuchó a su fundador, el presidente Andrés Manuel López Obrador, no tuvo problemas, consideró el coordinador de Morena en el Congreso de la Unión, Mario Delgado, ante la actual disputa por la elección del diputado Alfonso Ramírez Cuéllar como presidente interino del partido.

“El momento en que Morena dejó de escuchar al presidente empezó a enredarse, empezó a meterse en problemas, que es en donde estamos ahora”, consideró.

Mario Delgado calificó como un despropósito que se desafíe al interior del partido la recomendación del Ejecutivo federal de no emplearse a la encuesta como método de elección e incluso, dijo, que les gana la ambición por mantener el poder en lugar del interés por preservar el proyecto de la Cuarta Transformación.

“Les gana la ambición, y aquí ningún interés particular puede estar por encima del interés de la 4T y Morena tiene esa responsabilidad”, señaló.

“Nos pudimos haber ahorrado muchos problemas, muchos jaloneos, muchas vergüenzas y ojalá se retome ese camino. Ojalá se escuche al presidente de la República”, agregó.

Delgado reiteró que continúa con su aspiración por contender el liderazgo de Morena, solamente si se acepta el método de encuesta.

Destacó que Morena tiene la misión de preservar el lopezobradorismo y garantizar la continuidad de la Cuarta Transformación.

Ante el cuestionamiento sobre si invitaría a Alfonso Ramírez Cuéllar o a Yeidckol Polevnsky, secretaria general de Morena, como presidente o presidenta de Morena, a las plenarias que se realizarán en el Congreso de la Unión, dijo que la invitación será abierta para ambos.