Miércoles de Ceniza se llevará a cabo en 60 parroquias de Torreón

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Miércoles de Ceniza se llevará a cabo en 60 parroquias de Torreón

No se impondrá la cruz en la frente a las personas para evitar contagios, sino que los padres tomarán la ceniza, se acercarán a los fieles y la dejarán caer sobre la cabeza de cada uno, sin decir nada. Foto: Sandra Gómez
No se impondrá la cruz en la frente a las personas para evitar contagios, sino que los padres tomarán la ceniza, se acercarán a los fieles y la dejarán caer sobre la cabeza de cada uno, sin decir nada

Este año, con motivo de la pandemia de Covid-19, el culto del Miércoles de Ceniza se llevará a cabo solo en 60 parroquias de la Diócesis de Torreón, informó el vocero diocesano, José Luis Escamilla Estrada.

Señaló que, con el propósito de atender las medidas sanitarias para evitar contagios de coronavirus, mañana miércoles 17 de febrero, los sacerdotes de cada parroquia se dirigirán una sola vez a los fieles “arrepiéntete y cree en el evangelio”, o bien “polvo eres y en polvo te convertirás”.

El Padre Escamilla recordó que este año no se impondrá la cruz en la frente a las personas para evitar contagios, sino que los padres tomarán la ceniza, se acercarán a los asistentes y la dejarán caer sobre la cabeza de cada uno, sin decir nada.

La ceniza es la toma de conciencia de que necesitamos arrepentirnos y volver a Dios, reconociéndonos como pecadores y de esta manera dijo que el significado se conserva, igual que la misa y los sacramentos.

"El significado lo conservamos y hay que vivirlo dentro de las circunstancias, de la pandemia", expresó.

Con el Miércoles de Ceniza inicia la temporada de Cuaresma, que marca la etapa previa a la Semana Santa y donde se empieza a preparar durante 40 días a los cristianos para la Pascua: pasión, muerte y resurrección de Jesús.

Desde que inició la pandemia por el Covid-19, la iglesia católica modificó sus actividades e implementó filtros sanitarios en los accesos principales de las parroquias con el fin de proteger a la comunidad.

En la actualidad, los fieles acuden con cubrebocas y deben respetar la sana distancia además de que está limitada la asistencia de acuerdo a la capacidad de cada templo.