Mick Jagger y Dave Grohl se unen en una canción de rock pesado que esperan sea una especie de himno de la pandemia: “Eazy Sleazy”.

“Es una canción que escribí sobre salir del encierro, con algo de ese optimismo tan necesario”, dijo Jagger en un comunicado el martes. “Gracias a Dave Grohl por tocar la batería, el bajo y la guitarra. Fue muy divertido trabajar con él”.

El dúo grabó la canción y su respectivo video desde distintas locaciones: Jagger en su casa y Grohl en el estudio de los Foo Fighters. La letra menciona “paredes de prisión”, “estrenos virtuales”, cifras “nefastas” y llamadas por Zoom. Jagger se queja: “Ya no me queda nada que ponerme”.

La canción también hace una referencia a Bill Gates, se burla de las teorías de la conspiración y de aquellos que niegan el cambio climático, mientras que revela graciosamente que “hay extraterrestres en el estado profundo”.

Pero al final parece haber esperanza. Jagger ve en el futuro “un jardín de delicias terrenales” cuando se administren las vacunas y terminen las cuarentenas y los cierres.

“Todo se pondrá muy loco / Estará bien de noche / Pronto será un recuerdo / que tratas de recordar que debes olvidar”, dice parte de la letra.