Michael Cohen, el exabogado del presidente estadounidense Donald Trump, a partir del próximo lunes comenzará a cumplir su condena en una prisión que no es nada común, porque es catalogada como una cárcel "de lujo".

La prisión en Otisville se ubica cerca de la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, y entre los compañeros Cohen estarán el exastro de Jersey Shore Michael, 'The Situation', Sorrentino y el contador Kenneth Starr, acusado de defraudar a celebridades como la actriz Uma Thurman, el expresidente de Cendant Walter Forbes y el exgobernador de Connecticut, John Rowland.

Es una prisión federal a 113 kilómetros cerca de dicha ciudad en la que delincuentes de cuello blanco pueden cumplir sentencia jugando bochas y saboreando el dulce judío rugelach.

Ubicado en un pintoresco paisaje rural en las montañas Catskills, la cárcel de Otisville es en realidad un complejo de dos prisiones federales con un total de 800 reclusos: en el recinto de mediana seguridad, en la que el exastro de la NFL, Darren Sharper, cumple 20 años por violación, y una instalación para delincuentes no violentos, como Cohen.

El exabogado de 53 años, deberá presentarse en la prisión el lunes para comenzar una sentencia de tres años por pagar dinero a cambio del silencio de mujeres que dijeron haber tenido encuentros sexuales con Trump, evasión fiscal, mentirle al Congreso y delitos de finanzas de campaña.

La oficina que administra el sistema de prisiones federales ha mantenido silencio y rechazó la petición de medios de comunicación para visitar las instalaciones.