Piedras Negras, Coah.- En México existen las condiciones geográficas y climatológicas favorables para producir maguey o agave para mezcal y sotol en tierras prácticamente marginales de nueve entidades federativas, donde otros cultivos ofrecen pocas posibilidades de desarrollo por su baja productividad, señaló el presidente del Sistema Producto Maguey-Mezcal y Sotol, Alfredo Conde de la Cruz.
“Nuestras variedades de maguey mezcalero son de tipo silvestre y en absoluto naturales; es decir, orgánicas, lo que les da un ‘plus’, comparado con otro tipo de bebidas, incluidos el whisky o el brandy”, subrayó.
Añadió que en 2016 se realizaron exportaciones por más de 2 millones de litros de mezcal, de un total producido de 3.8 millones de litros.
“Se han identificado más de 6 millones de hectáreas que reúnen las condiciones físicas y climatológicas para este cultivo en los estados de Oaxaca, Puebla, Guerrero, Michoacán, Guanajuato, Zacatecas, San Luis Potosí, Tamaulipas y Durango”, mencionó.
Destacó que estas entidades son reconocidas por su ‘denominación de origen’ para efectos de consumo nacional y, sobre todo, para la exportación de un producto que ha demostrado su calidad, naturalidad, adaptación para su desarrollo en estas zonas, y con potencial de consumo en países europeos.
Añadió que los productores de maguey mezcalero están pasando de plantaciones silvestres a plantaciones comerciales, con la ventaja de que, una vez que el agave está en desarrollo, es posible dejar entre hileras, que crezcan pastos para el ganado, sin que se perjudique la plantación.
“Esto nos sirve, porque entre las hileras de agave se propicia la limpieza de las plantaciones, sin que el cultivo sufra daños. No es consumido por los animales”, dijo Conde de la Cruz.
El tiempo que hay que esperar para el aprovechamiento del agave, es de entre 8 y 12 años. Esto se da en función de las variedades. Por ejemplo, en el estado de Durango, el agave se puede aprovechar entre ocho y 10 años. La variedad “espadín” dura 8 años para el corte.
La rentabilidad del cultivo de agave es muy favorable en los estados señalados, en virtud de que no corresponden a suelos de alta calidad ni son de riego ni humedad. Son de clima semidesértico, donde los cultivos de ciclo anual ofrecen bajos rendimientos.
En estados como Zacatecas y San Luis Potosí, una gran cantidad de tierras se destinan al cultivo de maíz y frijol, con muy baja productividad. Los rendimientos si acaso alcanzan 200 kilogramos por hectárea, sin posibilidad de recuperar el valor del trabajo y la inversión campesina.
“Si sembramos agaves para producir mezcal, es posible aprovechar la tierra, evitar la erosión y, al cabo de algunos años, tener el beneficio del aprovechamiento de esta noble especie que soporta altas y bajas temperaturas, periodos largos de sequía y que puede ser útil para pastoreo sin perjuicio de la planta, que no es apetecida por el ganado”, afirmó.
Dijo que estan en el proceso de conseguir apoyos institucionales para la plantación de este agave en los estados donde puede tener un buen desarrollo. Por ejemplo, se gestiona que el gobierno federal continúe con el apoyo de lo que fue Procampo, ahora es Proagro, a fin de que el campesino cuente con un ingreso.