El ministro Eduardo Medina Mora llamó al presidente Andrés Manuel López Obrador y al Poder Legislativo a respetar al Poder Judicial de la Federación.

Además, pidió respetar la capacidad que tiene para reformarse e impartir una mejor justicia a los ciudadanos.

Durante su informe de labores como presidente de la Segunda Sala de la Corte, Medina Mora llamó también a la unidad de los ministros.

Medina Mora, quien fue titular del Cisen, la Procuraduría General de la República y la Secretaría de Seguridad Pública Federal, mencionó que al inicio de 2019 se elegirá al nuevo presidente de la Corte y del Consejo de la Judicatura Federal.

El ministro calificó a la Judicatura como la “mejor institución de la República”, lo que representa una enorme oportunidad de mejorar y hacer que los recursos tengan un mayor impacto en las necesidades de los justiciables.

“Lo anterior requiere unidad y liderazgo compartido con todos los juzgadores del Poder Judicial de la Federación. Quien elijamos como presidente, tiene que asumir este propósito como eje central de su política judicial. Es una tarea del Poder Judicial hacia el Poder Judicial. En esto se sustenta la autonomía.

“Quien asuma la presidencia tiene la obligación irrenunciable de hacer las cosas mejor y usar mejor los recursos. No hay espacio para el desperdicio o la ineficacia. En esto consiste ser un poder fuerte.

“Respetamos a los otros Poderes (Ejecutivo y Legislativo) y órganos del Estado en el ámbito de sus competencias y responsabilidades constitucionales, pero hoy más que nunca, requerimos que nos respeten. Que respeten nuestra capacidad de reformarnos y cumplir mejor con los justiciables, con los ciudadanos”, expresó Medina Mora, presidente de la Segunda Sala y quien ha encabezado el Centro de Investigación y Seguridad Nacional, así como la Procuraduría General de la República, la Secretaría de Seguridad Pública Federal y embajador de México en el Reino Unido y Estados Unidos.

El ministro señaló que en un estado de derecho presupone, por una parte, la tolerancia entre quienes son contrincantes legítimos en la vida pública y, adicionalmente, la contención institucional, esto es, un uso pertinente de las facultades institucionales que garantice un sistema de controles y equilibrios.

“Los tres Poderes del Estado tenemos un papel primordial para alcanzar y asegurar la consolidación del estado de derecho. Se requiere un compromiso genuino del Poder Legislativo y del Poder Ejecutivo con la preservación de la independencia judicial. Se requiere también que el Poder Judicial respete los ámbitos de actuación que corresponden al Legislativo y Ejecutivo, conforme el lugar y naturaleza que les ha asignado el Constituyente”, declaró.

Por su parte, la ministra Norma Lucía Piña mencionó que durante los últimos años en México se han venido construyendo instituciones que han cimentado las bases para la convivencia civilizada y democrática, “fundadas en el gobierno de las leyes frente al gobierno de los hombres y en el ideal de someter todo Poder al derecho y a la Constitución para limitar el poder del Estado y proteger los derechos fundamentales de todos”.

“Esas instituciones con todas las imperfecciones que se le pudieran atribuir, y que son perfectibles, han hecho posibles avances democráticos sociales indiscutibles. Una de ellas, es el Poder Judicial de la Federación y esta Suprema Corte de Justicia de la Nación”, abundó.

Por desgracia, añadió la ministra Piña presidenta de la Primer Sala, a pesar de que se ha avanzado, no se ha logrado superar todavía, las profundas desigualdades sociales que laceran a nuestro país, y la corrupción y la inseguridad que permean en muchos ámbitos de la vida nacional.

Dejó claro que las reformas legales por sí mismas no transforman la realidad aunque pueden contribuir a modificarla.

La ministra enfatizó que es de la máxima importancia que toda transformación social, verdaderamente democrática preserve a independencia y autonomía de los jueces.