“Me decía que se iba a morir, se estaba despidiendo de mí, decía que el tráiler había chocado, se había volteado; yo me siento muy mal, mi corazón no me está funcionando, se me está acabando la respiración y yo escuchaba los gritos de todas las personas que se encontraban ahí, entonces fue un momento de angustia que yo pase muy feo”, narró Lorena Lara, esposa de Moisés Gómez de Lira, uno de los migrantes que viajaban de en el tráiler que fue abandonado en el estacionamiento de un centro comercial en San Antonio, Texas.

Tras la llamada telefónica, Lorena Lara fue la encargada de avisar lo ocurrido a los familiares de los demás migrantes que viajaban con su esposo.

En los siguientes días y más tranquilo, Moisés Gómez relató a su esposa los momentos de desesperación que se vivieron en el tráiler, en donde asegura viajaban más de 100 personas entre ellas menores de edad; uno de ellos perdió la vida.

"El me comentaba que iban más de 100 personas y él me comenta que iban cuatro niños, él me comenta que de los niños que iban el primero que falleció fue un niño de 14 años”, explicó.

Lorena Lara detalló que su esposo le comentó que los migrantes de El Llano estuvieron a punto de desistir de emprender el viaje y es que durante 15 días esperaron en una casa de seguridad hasta que llegaron por ellos.

Recuerda que 38 personas subieron al tráiler que en ese momento ya estaba lleno, los migrantes fueron separados, su esposo junto con su primo se quedó en el centro, mientras a otros les toco hasta el fondo del tráiler o pegados en la puerta.

Al cerrar las puertas, de acuerdo a lo narrado por Moisés Gómez a su esposa, todo pasó muy rápido, sólo recuerda que se quitaban las playeras para mojar su boca con su sudor.

"Dice que todo paso muy rápido, que el oxígeno se acabó muy rápido, él dice que se quitaban sus playeras llenas de sudor, entonces para poder mojar su boca, la exprimían en su boca el sudor para poder tener mojada su boca”, agregó.

Moisés tenía apenas cuatro meses de haber regresado de Estados Unidos, después de seis años y medio de trabajar para tener una vida mejor.

"El tiempo que él estuvo aquí fueron muy pocas las ocasiones que él trabajó; entonces en realidad fue muy poco el dinero que el ganó en esas ocasiones y allá le decían que había mucho trabajo y todo, y por eso le dieron ganas de volverse a ir”, comentó.

Moisés perdió el conocimiento, su primo José Luis fue quien se encargó de bajarlo del tráiler una vez que se abrió la puerta

"Dice, como pude yo me arrastré hasta donde sabíamos que las camionetas nos iban a estar esperando y ya ahí yo no sé, si ellos mismos me subieron o el compañero me haya subido, dice ya cuando yo desperté, desperté en la casa donde íbamos a llegar”, relató.

En la casa, Moisés encontró un teléfono celular y desde el baño se comunicó con su esposa para contarle lo que había pasado.

Después de lo ocurrido, Moisés piensa regresar a su hogar en El Llano, una vez que se recupere para nunca volver a probar el sueño americano.

Moisés no aparece en los registros de las autoridades ya que logró escapar y llegar a su destino, desde donde se comunica con su esposa quien se encuentra preocupada por su salud.

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