El poder del "Money" fue superior y Floyd Mayweather Jr. demostró que es el mejor libra por libra al derrotar a Conor McGregor por nocáut técnico en el décimo asalto. 

McGregor por momentos buscó enterrar el legado de Mayweather pero la experiencia del "Money" fue determinante. 

Como se esperaba, Mcgregor fue atacando a un cuidadoso Mayweather en los primeros asaltos, sorprendiendo a propios y extraños. 

El estilo de pelea de McGregor confundió algunas ocasiones a Mayweather, que cada vez tomaba más confianza mientras que el irlandés acumulaba cansancio. 

A partir del cuarto asalto, Mayweather continuó metiendo presión a McGregor, que aunque con varias dudosas prácticas se mantenía en el combate. 

Mayweather cambió su chip en el sexto asalto y se fue encima de su rival conectando un par de combinaciones, algo extraño viniendo del peleador más defensivo del mundo. 

McGregor mostraba cansancio pero no dejaba de intentar golpear al norteamericano. 

En la UFC, las peleas de campeonato son de 25 minutos y Mayweather lo había llevado al límite por lo que en el noveno asalto el cansacio fue más notorio para McGregor que ya estaba de pie por instinto. 

Mayweather salió a terminar el combate en el décimo asalto con buenas combinaciones y rectos que echaron hacia atrás al artemarcialista y lo hicieron tambalear. 

Todavía de pie, McGregor aceptó los golpes de Mayeather pero el final era inminente. 

El referee se interpuso entre los dos para parar la pelea y darle la victoria a Mayweather.

Con la victoria, Mayweather superó al legendario Rocky Marciano como el boxeador con más victorias sin derrotas en su carrera con 50.