Las últimas campañas -bastante penosas- que Chivas ha registrado tendrían graves consecuencias en el futuro próximo, pues si hoy terminará el torneo se ubicarían en el sótano de la tabla de cocientes.

Como sabemos, dicho computo contempla los puntos obtenidos en los seis más recientes certámenes, de modo que para el Apertura 2019 ya no contarán las unidades logradas en el Apertura 2016 y Clausura 2017.

Es por ello que el Rebaño Sagrado comenzaría la siguiente temporada en el escalón décimo quinto con 68 puntos, es decir, 4 por arriba del Atlas y Querétaro, equipos que ocuparían los peldaños subsecuentes; cabe señalar que Veracruz, equipo descendido, arrancaría de cero si es que paga la multa para quedarse en Primera División, de manera que su cociente sería muy volátil.

El descenso: Un fantasma conocido en el chiverio

Lo más importante para los rojiblancos por ahora será cerrar el Clausura 2019 de la mejor manera posible en aras de separarse de los que serían sus rivales en la lucha por no descender.

No es la primera vez que Chivas pelea por resguardar la categoría en los tiempos recientes, pues en 2015, cuando llegó Matías Almeyda, la escuadra también atravesaba por una situación bastante comprometedora, mas el argentino no sólo resolvió la crisis, sino que además dejó cinco trofeos en las vitrinas del popular club.